El seleccionado de Brasil se clasificó ayer a los cuartos de final del Mundial de Sudáfrica tras vencer por 3-0 a Chile, en un cotejo desarrollado en el estadio Ellis Park de Johannesburgo. Juan y Luis Fabiano, ambos en la primera parte, y Robinho, en el complemento, marcaron los goles de Brasil, que en cuartos de final se enfrentará con Holanda, el próximo viernes (a las 11 de Argentina) en Puerto Elizabeth.

El gol de Juan, un cabezazo, tras un corner enviado desde la derecha por Maicon, le abrió a Brasil el camino a una victoria tan lógica como contundente. Con el resultado a su favor, el seleccionado dirigido por Dunga manejó la pelota y el ritmo del partido y, cada vez que pudo, puso en aprietos a un Chile que se vio superado ampliamente.

Como sucediera en ocasiones anteriores, Brasil no exhibió lujos, pero sí mostró solidez. A eso, si se quiere, habrá que sumarle el manejo de la pelota que tuvieron Kaká y Robinho, la velocidad que impusieron Maicon y Dani Alves cada vez que se lanzaron en ataque y la seguridad de Lucio y Julio César.

Chile hizo lo que pudo. Durante media hora aguantó el partido y, a través de remates de media distancia de Alexis Sánchez o Humberto Suazo, trató de acercarse al arco defendido por Julio César. “Este partido de hoy no es el partido de hoy, es el resultado de tres años y medio de trabajo”, señaló Dunga tras la victoria. De todos modos, advirtió que su equipo, que busca el hexacampeonato mundial, todavía no tocó techo.

“Debemos mejorar todavía en todos los sectores de nuestro juego. Fue un partido excelente, Chile jugó de manera excepcional, tuvo mucha posesión del balón”, destacó el DT brasileño, quien anticipó que Brasil reducirá la intensidad y duración de sus entrenamientos. “Tenemos que descansar, ser cautelosos, también con nuestros entrenamientos. Sabemos que los jugadores brasileños adoran entrenar, pero lo estamos reduciendo para que puedan destinar su energía al partido.”

Y sobre su próximo rival, Dunga destacó: “El equipo holandés es excelente, altamente calificado. Fuertes, resistentes, por lo general los holandeses son así”, dijo Dunga, quien como jugador derrotó a Holanda en los mundiales de EE.UU. ’94 y Francia ’98. “Holanda tiene una buena tradición jugando mundiales, es un equipo muy difícil, con un estilo muy parecido al sudamericano, juegan como sudamericanos”, añadió.

Por su parte, Robinho, elegido mejor jugador del partido por la FIFA, señaló: “El equipo tiene que mejorar, pero estamos en el camino correcto. El próximo partido es otra final y vamos a demostrar nuestro mejor fútbol”. En tanto, Luis Fabiano consideró: “La selección realmente tuvo una evolución. Tuvimos varias jugadas y conseguimos jugar cómodos, tocando la bola, armando el contraataque que nos gusta jugar”.

Por el lado de los chilenos, el arquero Claudio Bravo sintetizó: “Nos vamos con la tranquilidad de haber dejado todo”.