Sudáfrica 2010 ya es un hito histórico para el fútbol sudamericano, que con el triunfo de Paraguay colocó por primera vez a cuatro de sus representantes en cuartos de final. Nunca antes cuatro selecciones de Sudamérica habían estado entre los ocho mejores del torneo: Uruguay, Brasil y Perú lograron un sitio entre los ocho mejores en México 1970, y Argentina, Brasil y Perú repitieron la marca en Argentina 1978.

El Mundial se convierte así en una suerte de Copa América con el campeón y el subcampeón de Europa, España y Alemania, Holanda y un solo africano, Ghana, como invitados. Cuatro de los cinco representantes del subcontinente alcanzaron esta fase, los pertenecientes a los países del Mercosur, y solo Chile se quedó afuera porque debió eliminarse con Brasil en los octavos de final. En los 20 partidos que jugaron ya los equipos sudamericanos en esta Copa del Mundo, sólo sufrieron dos derrotas, las de Chile ante España y Brasil.

En los 18 partidos restantes, los representantes de la Conmebol sumaron 13 triunfos y cinco empates, aunque la Argentina es la única selección de la región con puntaje ideal: cuatro victorias en cuatro partidos, ante Nigeria, Corea del Sur, Grecia y México; sólo Holanda iguala esa marca. Brasil y Uruguay repiten rendimiento: tres triunfos y un empate. Los brasileños vencieron a Corea del Norte, Costa de Marfil y Chile, igualando con Portugal; los uruguayos empataron con Francia en su debut y más tarde doblegaron a Sudáfrica, México y Corea del Sur, mientras que Paraguay, que por primera vez en su historia futbolística accedió a cuartos de final, llega a esta instancia con tres empates (ante Italia, Nueva Zelanda y Japón) y una victoria (sobre Eslovaquia).

El cuadro de cuartos de final permite además algo sin precedentes: cuatro sudamericanos en semifinales, lo que se dará si Brasil vence a Holanda, Uruguay a Ghana, Argentina a Alemania y Paraguay a España.

Las razones de semejante predominio deberán estudiarse en profundidad una vez que acabe la Copa del Mundo, pero la situación del subcontinente como auténtica fábrica de futbolistas del mundo, siempre proveedora de piernas de obra para los mejores equipos de Europa, y la dureza de las Eliminatorias sudamericanas, las más extensas de toda la fase previa que organiza la FIFA, que supone un incremento de competitividad en los equipos que participan, pueden ser las primeras pistas de este buen momento.

Pese a ese rol destacado que está cumpliendo, es improbable que Sudamérica tenga más plazas en el próximo Mundial, aunque el hecho de que sea organizado por Brasil quizá posibilite que sean seis los participantes del continente en la Copa del Mundo del 2014.

El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, rechazó ayer la idea de que la buena actuación tenga como consecuencia más plazas para la Conmebol. “Sólo son diez federaciones”, contestó, dejando claro que no piensa ampliar el cupo, aunque selecciones como las de Ecuador, Colombia o inclusive Venezuela tengan más nivel futbolístico que la mayoría de los representantes de Africa, Asia u Oceanía que jugaron en Sudáfrica.

“El debate (por los cupos) ya comenzó entre bastidores, pero dejen que termine este torneo”, dijo el suizo ayer en Johannesburgo.

En este Mundial, el idioma español retoma un papel preponderante por la clasificación de uruguayos, argentinos, españoles y paraguayos, todos con una lengua común.