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–¿Bautizar este álbum con el nombre Lado B. Ahora más que nunca fue una forma de anticiparse a las cargadas?

–En parte sí, pero también implica el hacerse cargo de una realidad dolorosa, dura para los que sentimos a River. Es una forma de desahogarse y reafirmar la identidad del hincha ante una circunstancia como la del descenso. El artista tiene que expresarse en momentos difíciles. Un pintor hubiera hecho un cuadro, un Guernica rojo y blanco, pero soy cantante y sentí que lo mejor que se podía hacer frente a esta realidad era componer, y elaboré este disco, que viene a ser la tercera entrega de Rivertidísimo, cuya primera edición se lanzó en 1997.

–Hay un tema dedicado a Matías Almeyda, ¿es una forma de apuntalarlo ahora que es director técnico del equipo que intenta volver a Primera?

–”La canción para Matías” es un homenaje a una persona que siente la camiseta, que sufrió mucho el descenso. Lo conozco desde chico, cuando recién llegó desde Azul para probarse en las inferiores. Tengo un gran aprecio por lo que es como persona, como jugador y ahora como DT. Ojalá, en la cancha, con la camiseta de River, entraran siempre once Almeydas.

–¿Habló con él por estos días?

–Sí, me llamó para agradecerme la canción, me dijo que le gustó mucho. Lo sentí entero, con muchas ganas de hacer bien su laburo y con una convicción enorme de que el equipo va a conseguir el ascenso.

–¿Cree que el hincha de River asumió que el club está en la B Nacional?

–Es duro, parte de un proceso y la verdad, todavía cuesta, sobre todo cuando llega el domingo y uno se da cuenta de que no jugamos. Fue duro también jugar a puertas cerradas y enfrentarnos con equipos que tienen sus camisetas tan plagadas de publicidades que parecen autos del Turismo Carretera. Por suerte, jugamos también con Quilmes y Gimnasia y más adelante con Huracán o Central, cuadros que poseen una historia en el fútbol grande, y eso permite que todo esto duela un poco menos.

–¿Cuál es la responsabilidad de José María Aguilar en toda esta historia?

–En principio, hasta que no se demuestre nada en la Justicia, no puedo hacer ninguna acusación contra él ni dudar de su honor. Sin embargo, la gestión fue una gran decepción. Se presentó como alguien que venía a ofrecer “un modelo de izquierdas”, a contraponerse al modelo de (Mauricio) Macri en Boca, y no cubrió esas expectativas. Se desvalorizó la economía del club, se vendieron jugadores por sumas astronómicas y el club casi se funde. Hoy, el 9 de Real Madrid (Gonzalo Higuaín) y el 5 del Barcelona (Javier Mascherano) salieron de River... Y estamos en esta situación. Cuanto menos, lo de Aguilar resultó ineficiente, no estuvo a la altura de la responsabilidad que tenía.

–¿Es el principal responsable del descenso?

–Hubo muchos factores, nunca hay una sola causa cuando hay un descenso. Igualmente, tuvo una gran responsabilidad en todo esto.

–¿Y Passarella?

–Como jugador siempre lo respeté y lo admiré, sin dudas es de lo mejor que hubo en la historia de River. Sin embargo, subestimó la situación. A principio de año debió reforzar para formar un plantel más competitivo.

–La última. ¿River vuelve a Primera al cabo de esta temporada?

–Creo que sí, y que todo esto nos va a fortalecer para recuperar el lugar que nunca debimos perder en el fútbol argentino.