Juan Martín Del Potro vivió ayer un día perfecto en Suiza. El tandilense, de buen nivel tras su lesión en la muñeca izquierda, accedió a los cuartos de final del ATP 500 de Basilea, tras vencer con un contundente 7-5 y 6-1 al estadounidense Brian Baker, y se aseguró un lugar en el Masters de Londres, debido a la baja del español Rafael Nadal. “Es un premio por todo lo que hice en la temporada”, señaló el argentino.

Cuando Del Potro decidió, en el medio de la serie de Copa Davis ante República Checa en Parque Roca, parar tras un importante trajín de partidos, con el objetivo de recuperarse definitivamente de la lesión en la muñeca, que lo afectaba desde principios de agosto en el Masters 1000 de Cincinnati, pocos hubieran imaginado que los buenos resultados llegarían tan pronto.

El incuestionable título en Viena no fue un espejismo. Sin estar aún al ciento por ciento de sus posibilidades, el tandilense demuestra partido a partido que está firme, sólido y en buena forma. Con su derecha como principal aliada y un saque devastador, sigue con su paso arrollador por el circuito.

Ayer, la víctima de Del Potro, número ocho del mundo, fue Baker (57), a quien derrotó sin problemas por 7-5 y 6-1. El estadounidense sólo estuvo en partido mientras pudo sostener su saque, pero no tuvo chances de vulnerar al argentino, que estuvo impecable con su juego de fondo, y ganó el encuentro en apenas una hora y 18 minutos de juego.

Con esta victoria, el argentino accedió a los cuartos de final del certamen suizo, en donde enfrentará al sudafricano Kevin Anderson (39), quien venció 6-3, 6-7 (5) y 6-3 al australiano Marinko Matosevic (51). El historial entre ambos jugadores es liderado por el tandilense, quien batió al africano en los tres duelos en los que se vieron las caras: Delray Beach, Viena y Valencia, todos en 2011 y sobre cemento.

Sin embargo, la victoria de ayer vino con un premio aún mayor que el boleto a cuartos de final de Basilea. Es que debido a la baja del español Rafael Nadal, quien no jugará en lo que resta del año, puesto que aún se ha recuperado de una tendinitis en la rodilla izquierda que lo tiene a maltraer desde Wimbledon, y a las tempraneras eliminaciones del francés Jo-Wilfried Tsonga y Janko Tipsarevic en la primera ronda del ATP 500 de Valencia, Del Potro obtuvo su boleto directo para disputar del 5 al 12 de noviembre el Masters de Londres, que reúne a los ocho mejores jugadores de la temporada.

“Para mí, clasificar al Masters es un regalo por el trabajo que realicé durante todo el año. Estar en ese torneo significa mucho. Sólo habrá ocho jugadores luchando por quedarse con el título. Estaré encantado de estar allí otra vez. Quizá tenga la oportunidad de llegar a una nueva final”, manifestó el tandilense, que en el 2009, tras ganar el US Open, perdió el título que David Nalbandian ganó en 2005, a manos del ruso Nicolai Davydenko, hoy lejos de los primeros planos del circuito.

Además del tandilense, los otros cinco jugadores que ya tienen su boleto para la última competencia del año son el suizo Roger Federer (1), el serbio Novak Djokovic (2), el escocés Andy Murray (3), el español David Ferrer (5) y el checo Tomas Berdych (6). Para las dos plazas restantes hay cuatro candidatos: los mencionados Tsonga y Tipsarevic, el francés Richard Gasquet y el español Nicolás Almagro.