“Si el club decide traer a otro arquero para reemplazar a (Pablo) Migliore (detenido en el penal de Ezeiza) no importa, porque yo voy a seguir peleando por mi lugar de la misma manera que ahora”, advirtió Matías Ibáñez, que tras la detención del ex Boca se hizo cargo del arco de San Lorenzo. “Yo nunca bajé los brazos; cuando era suplente, entrenaba con la misma dedicación que ahora, esperando mi oportunidad”, subrayó.

Ibáñez, que llegó al club de Boedo proveniente de Olimpo, en un canje por Nereo Champagne, fue el designado por el entrenador Juan Antonio Pizzi para suplir la baja de Migliore, que, acusado de “encubrimiento agravado”, fue detenido hace poco más de 15 días, tras el encuentro frente a Newell’s por la séptima fecha. “Todos nos sorprendimos en el plantel cuando pasó eso, pero cuando llega el momento de jugar los partidos, uno se abstrae de todo, porque de lo contrario viene el bajón y el perjuicio es mucho mayor”, reveló el arquero, titular en los últimos dos partidos de su equipo. Además reconoció que se extraña a Migliore “porque siempre estaba haciendo bromas” en el vestuario. “A Pablo lo llamé dos veces desde que lo detuvieron y lo noté bajoneado”, agregó. Hoy le ampliarán la indagatoria al arquero detenido.

En tanto, Ibáñez apuntó que la decisión del entrenador de apartar del plantel al volante uruguayo Luis Aguiar fue “algo en lo que el plantel no se puede meter”. Y sentenció: “No podemos hacer nada al respecto cuando sucede algo así, y tampoco sirve lamentarse, porque es peor”.