La barra de Independiente, con su jefe, Pablo “Bebote” Alvarez, a la cabeza, fue interceptada ayer en Camet por la policía y llevada a Chapadmalal, lejos del tejido urbano de Mar del Plata. Como pauta del operativo, la policía escolta a los micros por la Ruta 2 y al llegar a los kilómetros previos guía a los conductores hacia distintos lugares apartados, los cuales se les informan en ese momento. Así pasó con Independiente cuando al llegar a Camet la policía dispuso que los micros y autos en que viajaban barras sigan hacia Chapadmalal, al sur de Mar del Plata, y más cerca de Miramar. Fuentes del operativo de seguridad en la provincia de Buenos Aires dijeron que el cometido es evitar que los barras estén en la ciudad, en los horarios previos y posteriores a los partidos.

En Independiente, desde que el sindicalista Hugo Moyano asumió la presidencia, ya no hay derecho de admisión para su jefe, Alvarez, que tiene franqueada toda puerta del club y hasta el estadio de Avellaneda.