DEPORTES › PERFUMO PRESENTO SU PROYECTO Y A SUS COLABORADORES
El Mariscal ya tiene el equipo
Por Gustavo Veiga
Como si esquivara a un delantero con un quiebre de cintura en los viejos tiempos, Roberto Perfumo presentó en sociedad sus planes deportivos para el 2004. Tras un silencio stampa que se prolongó cuatro meses, el secretario de Deporte, entre humorístico y sentencioso, formuló varios anuncios, presentó a sus principales colaboradores y hasta se atrevió a soñar con Buenos Aires como sede de los Juegos Olímpicos del 2020. “La conformación del equipo no fue fácil. Me volqué más por la capacidad que por el amiguismo”, dijo luego de nombrar a Iris Fernández y a Claudio Morresi –sus nuevos subsecretarios–, al ex nadador Luis Alberto Nicolao y a su asesor Benito de Miguel.
Ante un auditorio que reunía a funcionarios, periodistas y algunos amigos, el Mariscal afirmó que contará con un presupuesto de “35 millones y pico de pesos...”, aseguró que su bajo perfil obedeció a que “necesitábamos mirarnos para adentro y reorganizar la parte administrativa”, y anticipó que “el deporte de alto rendimiento y el social irán de la mano”. Perfumo habló en el salón VIP del Cenard y se apoyó en sus hombres de confianza para responder.
Entre las ideas que intentará plasmar se destacan la instrumentación de la Ley Nacional del Deporte (Nº 20.655), la creación de una Universidad del Deporte y objetivos más módicos, pero no por ello menos imprescindibles, como la refacción del natatorio olímpico y la reconstrucción de la pista de atletismo del Cenard. A estos propósitos los combinó con anhelos de más difícil realización, como uno que denominó “el sueño que el deporte argentino merece”: la posibilidad de que Buenos Aires sea sede de los Juegos Olímpicos del 2020 o en el 2024.
No sólo preguntaron los periodistas. Un par de funcionarios también le transmitieron sus inquietudes en público. Héctor Kurtz, director de Deporte de Misiones, lo consultó sobre el futuro de los Juegos Evita. “Vamos a replantearlos con más participación y apoyo”, subrayó Perfumo, como quien, tras cuatro meses de hermético silencio, ya se acomodó a una función que le demandará mucho más que el fútbol donde tanto brilló.