El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas, cayó ayer como visitante ante Sudáfrica por 30-23 en un encuentro correspondiente a la primera fecha del Rugby Championship 2016, disputado ante 27.000 espectadores en el Mbombela Stadium de Nelspruit. El equipo argentino ganaba por 10 puntos a 10 minutos del cierre, pero en el final del encuentro cometió errores no forzados, además de infracciones innecesarias, que lo privaron de la victoria. Matías Orlando y Santiago Cordero anotaron los tries del conjunto albiceleste y Nicolás Sánchez aportó tres penales y dos conversiones que no fueron suficientes para lograr por segundo año consecutivo vencer en su tierra a los Springboks. En el otro encuentro de la jornada Nueva Zelanda superó a Australia por 42-8 y lidera las posiciones con 5 puntos, seguido por Sudáfrica (4), Argentina (1) y Australia (0). Argentinos y sudafricanos volverán a medirse el sábado próximo en el estadio Padre Martearena de Salta, a partir de las 16.40, en tanto que en Wellington lo harán los All Blacks y los Wallabies.

Pese a tener por menos tiempo la pelota, a jugar con un hombre menos durante 10 minutos y a ser superados en el scrum, Los Pumas se terminaron llevando el primer tiempo por 13-10, fruto de una muy buena defensa y del aprovechamiento integral de las oportunidades que se les presentaron para marcar.

Durante los primeros instantes todo fue de Sudáfrica, que en ese lapso aprovechó para sacar diferencias con un try de Ruan Combrinck, tras buena acción de Elton Jantjies, en uno de los pocos desacoples defensivos de la escuadra albiceleste en el segmento.

Sobre los 15, Los Pumas lograron achicar con un penal de Nicolás Sánchez y a partir de ese momento equilibraron bastante el desarrollo más allá de que los Springboks estirasen ventajas con una nueva patada de Jantjies.

Pero una tarjeta amarilla recibida por Manuel Montero, tras una infracción infantil cometida en un reagrupamiento, dejó al equipo con 14. Parecía que se venía la noche.

Sin embargo, con un jugador menos Los Pumas disfrutaron de su mejor momento en la etapa. Achicaron con otro penal de Sánchez y pasaron a ganar con un try extraordinario, que nació en un inteligente movimiento de Martín Landajo, continuó con corridas de Facundo Isa y Joaquín Tuculet y terminó con Matías Orlando apoyando por el sector derecho, el opuesto al inicio de la jugada.

Fue un parcial de 10-0 pese a la desventaja numérica, que no se pudo ampliar cuando los equipos estuvieron otra vez en igualdad de condiciones, ya que Sudáfrica volvió a prevalecer y si no pasó de nuevo al frente fue por la mala puntería de Jantjies (erró dos penales) y Johan Goosen (falló uno) y a un error de Lionel Mapoe a quien se le cayó la pelota cuando estaba ya dentro del ingoal argentino.

Los Pumas estuvieron cerca de marcar en el inicio de la segunda mitad cuando Facundo Isa, de lo mejor del representativo nacional, quedó a centímetros del ingoal pero en el piso no logró mantener el control de la pelota y permitió un contragolpe sudafricano.

Poco a poco los Springboks comenzaron a imponer su rigor físico y lograron nivelar las cosas pasado el cuarto de hora con un penal de Jantjies. Pero Los Pumas volvieron a hacer pie y con un penal de Sánchez y un try de contragolpe marcado por Cordero tras un preciso kick del apertura tucumano sacaron 10 puntos de ventaja (23-13) a poco más de 10 minutos del cierre.

Sin embargo, en el tramo final del partido aparecieron errores no forzados y las ya clásicas infracciones tontas que le permitieron a los locales dar vuelta la historia.

Tras la salida del segundo try albiceleste, Tomás Cubelli cometió un knock on en campo propio y del consecuente scrum nació el try de Johan Goosen que dejó a los “Boks” a tres.

Después, una mala salida de campo propio –Hernández intentó patear, fue tackleado y perdió la pelota– derivó en un penal que Jantjies tradujo en el empate parcial en 23.

Y en el cierre un nuevo penal, en este caso en media cancha, le permitió a Combrinck ganar un line en los 22 metros albicelestes. Y ahí se empezó a gestar la acción que terminó con Warren Whiteley sellando la victoria sudafricana.

No fue una mala labor de Los Pumas, pero todavía siguen cayendo en errores que les hacen perder partidos imposibles. No fueron inteligentes en el final, no cerraron el encuentro y los Springboks no los perdonaron.