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No habrá definición argentina, pero sí al menos un finalista. Luego de vencer ayer 6-7, 6-1, 6-4 al español Albert Costa, en un partido complicadísimo de más de dos horas y media de juego, David Nalbandian tendrá hoy la chance de adjudicarse el Masters Series de Roma y, si lo consigue, de premio logrará su acceso al quinto lugar del ranking mundial de ATP, lo que se convertirá en su mejor ubicación en el listado internacional. También se le presenta una ocasión propicia para romper una racha adversa de casi 19 meses sin títulos (el último en octubre de 2002 en Basilea). Su rival de hoy (a partir de las 9, televisa ESPN) será el mallorquín Carlos Moyá, quien terminó con las ilusiones del tandilense Mariano Zabaleta al derrotarlo 6-3, 6-4 en una hora y 17 minutos.
El cordobés ofreció una demostración de su tenis dúctil, preciso a la hora de jugar a las líneas. Y además se exhibió mentalmente sólido, pero con problemas a la hora de jugar cerca de la red. Costa, campeón de Roland Garros 2002, casi no se equivocó en el parcial inicial, llegaron al tie break sin quebrarse y aprovechó un pequeño bajón del argentino para quedarse con el set. De allí en más, Nalbandian, que se llevó el segundo set por un holgado 6-1, tomó las riendas del partido, se hizo protagonista y sacó mucho mejor que en el parcial inicial.
El tercer set finalizó 6-4 para el argentino, que tuvo chances de resolver con mayor claridad el pleito, ya que apenas aprovechó dos de las 14 ocasiones que tuvo para quebrar el servicio de su rival. “El primer set estuvo muy igualado, pero en el segundo jugué un grandísimo set. También elevé mi nivel a partir del cuarto juego del set decisivo y supe sacar bien”, explicó el cordobés. Esta será la segunda final para el unquillense en un torneo de Masters Series. La primera fue el año pasado en Montreal, donde cayó ante el estadounidense Andy Roddick. “Estoy muy feliz por llegar a la que es mi primera final sobre polvo de ladrillo. Es importante estar en ella, pese a que prefiero otro tipo de superficies, y soy consciente de que debo mejorar sobre este terreno”, remarcó Nalbandian, que tendrá que recuperarse pronto del desgaste al que viene siendo sometido, ya que con el de hoy serán cuatro partidos en los últimos tres días.
El rival del cordobés será Moyá, que superó a Zabaleta y dejó sin efecto la posibilidad de que se diera una final argentina. Claro que más allá de su derrota en semifinales, el tandilense progresará una docena de lugares en el ranking internacional para volver a ubicarse entre los top-30. Zabaleta desperdició de manera increíble algunas posibilidades con las que contó en el segundo set. Por ejemplo, una cómoda derecha en la mitad de la cancha con Moyá sin chances en el fondo que terminó tirando increíblemente afuera. Si esa bola entraba, el argentino se hubiera puesto 4-2 y su saque, con chances de forzar a un tercer set.
El español, que se equivocó mucho menos que Zabaleta (17 contra 32 del argentino), jugó de manera impecable los puntos de cierre de games y de set. Allí estuvo la mayor diferencia entre ambos tenistas. “No puedo estar contento del partido, pues jugué muy mal. Estaba jugando bien esta semana y me voy satisfecho por los resultados obtenidos, pero triste por el encuentro de hoy. Espero seguir jugando bien en los próximos torneos y tomarme la revancha ante Carlos. Es un jugador muy bueno, que saca muy bien y sus golpes son difíciles de contrarrestar. Luché al máximo, pero no pude”, remarcó Zabaleta.