DEPORTES › ARGENTINA JUGO BIEN Y MERECIO EL EMPATE, PERO CAYO 1-0 ANTE MEXICO
Lástima que no se guardaron algunos goles
Luego de la exhibición ante Ecuador, el equipo de Bielsa no repitió esa tarea, aunque dejó aspectos positivos en su juego. La mancha fue la falta de definición, lo que impidió llegar a una justificada igualdad. Los aztecas se impusieron con un gol de Ramón Morales.
Argentina no pudo repetir su tarea frente a Ecuador y cayó 1-0 ante México, en un partido en el que no fue superado y en el que al menos debió rescatar un empate. La falta de precisión en el momento de definir resultó clave para que el conjunto de Marcelo Bielsa no pudiera emparejar el golazo de Ramón Morales con el que Mexico logró el triunfo. Ahora, Argentina se juega la clasificación el martes ante Uruguay, aunque de acuerdo a los restantes podría quedar como uno de los mejores terceros aún sin ganar ese encuentro.
La tarea que había realizado Argentina frente a Ecuador no pasó inadvertida para el entrenador Ricardo Lavolpe. Por eso, México supo tomar sus precauciones y se abroqueló bien para evitar el toque de los jugadores argentinos. Además, cuando el partido era muy parejo y casi no había habido chances de riesgo frente a los arcos, el conjunto azteca se encontró con un golazo que le posibilitó afirmarse más todavía en el esquema que había ideado su técnico. Desde 25 metros, Ramón Morales clavó en el ángulo un tiro libre para colocar el 1-0 que acentuó las posturas que traían ambos conjuntos desde los vestuarios.
Es que si bien sintió el impacto, Argentina no se apartó de lo planificado. Sin desesperarse, los intentos por abajo y la búsqueda del juego asociado fueron el denominador común en esa primera etapa. Sin embargo, los intérpretes no estuvieron tan aceitados como el partido ante Ecuador, lo que determinó que el dominio ejercido no se tradujera en tantas llegadas frente al arco de Oswaldo Sánchez. No obstante, pese a esa limitación y al ordenado dispositivo defensivo de los mexicanos, Argentina contó con varias ocasiones para alcanzar la igualdad: una combinación entre César Delgado y Javier Zanetti, que el lateral del Inter no alcanzó a definir con justeza; un cabezazo de Roberto Ayala, que se fue apenas desviado, y una volea de Delgado desde una posición inmejorable, que se elevó por encima del travesaño.
Lo de México resultaba práctico. Bien agrupado cerca de su arquero, con dos líneas de cuatro bien pegadas, conseguía obstaculizar los intentos argentinos. Y en ataque, la esperanza se limitaba a alguna corrida de Jesús Arellano, ya que el goleador Borguetti estaba bien neutralizado. Claro que con ese argumento no logró inquietar a la última línea argentina.
Con el correr de los minutos, el dominio del equipo de Bielsa se tornó más notorio. Por eso, las chances frente al arco mexicano se sucedieron una tras otra. Tuvo el gol Saviola tras un desborde de Kily González, aunque el anticipo del delantero se fue por el primer poste. También pudo anotar Delgado, pero su disparo fue interceptado por una mano casual de un defensor y luego le cometieron un penal que el árbitro no sancionó. Y hasta Ayala contó con una ocasión, pero su cabezazo fue bien controlado por el arquero Sánchez.
Los cambios ofensivos que intentó el entrenador argentino no dieron los resultados esperados. Es que tras las modificaciones, el conjunto albiceleste perdió el dominio de las acciones y ya no generó chances de gol. México se adelantó en el terreno, dividió la tenencia de la pelota y ya casi no pasó sofocones. Apenas un cabezazo de Figueroa que se fue al lado del palo fue la única ocasión para cambiar la historia.