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Con una charla con los jugadores y una práctica liviana, Alfio Basile comenzó su trabajo como técnico de Boca. “Llego con una enorme motivación y dispuesto a armar un gran equipo y ganar todo lo que se juegue”, les recalcó a los futbolistas y, tras el entrenamiento, confesó que se sintió “conmovido” con su llegada al club. Antes de partir rumbo a Tandil, donde con una quincena de jugadores realizará los trabajos de pretemporada, el ex entrenador de la Selección prometió que armará un equipo “que la gente sepa de memoria”.
“Aunque me lo imaginaba, Boca es impresionante. Parecido a la Selección. Porque sus hinchas aparecen por todas partes, hasta de abajo de la tierra, son menos moderados y hay que saludarlos a todos porque, si no, creen que estás agrandado”, comentó Basile, en un intento de explicar cuáles eran sus primeras sensaciones como entrenador de Boca. En cuanto a las metas, afirmó: “No existe otro objetivo que triunfar en todo lo que se juegue. Hasta los amistosos, porque si me va mal me van a matar por fracasar, y si gano voy a ser Gardel. Pero me tengo mucha fe”. Boca disputará este semestre el Apertura, la Copa Sudamericana y la Recopa ante Once Caldas.
“No tengo temores de dirigir acá –agregó–. Fui jugador y técnico en la Selección porque me tocó la varita mágica y el desafío fue bravo. Empecé a dirigir en los ’70 e hice la escuelita al frente de equipos que peleaban el descenso. Ahora tengo más experiencia, tranquilidad y me siento rejuvenecido, con una alegría inmensa y lleno de orgullo.”
En cuanto a los nombres que Boca tiene en carpeta, el flamante entrenador no agregó ni quitó nada sobre lo trascendido. “Los refuerzos son los nombres que el periodismo ya maneja. Figuran (Federico) Insúa, (Hugo) Ibarra y el colombiano (Freddy) Grisales, pero también hay en la lista otros nombres, opciones por si no prosperan éstas”, comentó.
También se refirió al apoyo que le brindó Diego Maradona, ahora vicepresidente del departamento de fútbol de Boca y principal promotor de su arribo al club: “Fue fundamental. Porque entre tantos técnicos que tuvo a lo largo de su trayectoria, me eligió a mí”, sentenció.
Luego del entrenamiento en Casa Amarilla, gran parte de los integrantes del plantel y el cuerpo técnico, que completan el PF Carlos Dibós y el ayudante Rubén “Panadero” Díaz, emprendieron el viaje hacia Tandil, en donde permanecerán hasta el 10 de julio; allí se les sumaría hoy Guillermo Marino, el ex Newell’s. “Esta pretemporada nos va a venir muy bien. Serán diez días en los que trabajaremos mucho en la parte física y un poco de ensayos tácticos durante la tarde”, anticipó. La delegación está compuesta por Abbondanzieri, Alvarez, Schiavi, Vargas, Battaglia, Bilos, Escalada, Palermo, Palacio, Delgado, Espíndola, Barros Schelotto, Morel Rodríguez y Cagna.