DEPORTES
El Harakiri
Niños
La FIFA respaldará en el Mundial al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). “Di sí a los niños”, es la consigna, según se informó ayer en una conferencia de prensa de la que participó el actor embajador Roger Moore, quien sostuvo que: “Durante los 31 días del Mundial morirá un millón de niños. Y en los 90 minutos que dura cada partido, 540 niños se infectarán con el virus VIH”.
Errores
Durante este Mundial, los jugadores amonestados con tarjeta roja o amarilla por haber simulado su rival una falta no serán suspendidos si resulta luego que todo fue una estratagema, anunció ayer Volker Roth, miembro alemán del Comité de Arbi
tros de la FIFA. “Si se trató de un error, el Comité de Disciplina puede decretar que no hay suspensión”, dijo.
Limpieza
El recién reelecto presidente de la FIFA, Joseph Blatter, quiere que el secretario general del organismo, el opositor Michel Zen-Ruffinen, se vaya ya. “El comité ejecutivo se encargará de nuestro Sr. Limpieza. Le llegó la hora”, Joseph Blatter, quien agregó: “Los comentarios negativos de Zen-Ruffinen después de mi elección pusieron el clavo en el ataúd”.
Intérprete
El técnico de la selección de China, Bora Milutinovic, quien casi no habla el idioma de sus pupilos, pidió a la FIFA que se le permita incorporar una persona más a su lado en el borde del campo de juego, lugar en el que sólo se permite estar al seleccionador. “Si no lo permiten, tendremos que esperar y ver qué pasa. Yo de chino no entiendo nada”, dijo con una sonrisa.
Sexo
Un sirio recién casado no mantendrá sexo con su esposa durante el Mundial gracias a una cláusula que aplicó en su contrato matrimonial. Su esposa no presentó ninguna objeción y aseguró que le dejará el “campo libre”, a tal punto que propuso mudarse a la casa de sus padres, quienes viven muy cerca del lugar, cuando televisen los partidos.
Pérdidas
El Mundial podría ocasionar gastos de casi 1000 millones de dólares en las oficinas de numerosas empresas alemanas. Cada asalariado que está dispuesto a ver el Mundial por televisión le ocasiona a su empresa pérdidas por valor de 1.200 dólares, y se estima que el nueve por ciento de los trabajadores del sector servicios no trabajará para ver todos los partidos por televisión, ya que, a causa de la diferencia, los partidos se juegan en horarios de trabajo.