Viernes, 3 de marzo de 2006 | Hoy
DEPORTES › LA SELECCION ARGENTINA A CIEN DIAS DEL MUNDIAL
El partido con Croacia le sirvió a Pekerman para pasar en limpio algunas conclusiones. Al técnico lo desvive no poder armar la defensa.
“Al equipo hay que trabajarlo más”, sintetizó José Pekerman tras el amistoso con Croacia en Basilea. Quedan 100 días para el debut de la Selección Argentina en el Mundial, el 10 de junio, en Hamburgo, ante Costa de Marfil, pero el entrenador sólo contará con 20 días de trabajo eficaz antes de esa presentación, desde mediados de mayo –cuando termina la actividad de los clubes–, hasta el partido con los africanos y, a lo sumo, un amistoso más. En esos 20 días, con la lista de convocados ya definida, deberá darle forma definitiva al equipo argentino. Julio Grondona le dio su respaldo público, lo que supone que en privado discutirá algunas cuestiones. Pekerman, que vuelve hoy a la Argentina, no está tan preocupado por el rendimiento del equipo, pero alberga algunas dudas en determinados sectores del campo.
Perder en tiempo de descuento con un gol hecho casi que con la cabeza en el área propia conduce a fijar la mirada escrutadora sobre la defensa: ese ha sido un ejercicio continuo en las últimas horas. “Individualmente tenemos los mejores defensores –ha dicho Pekerman–, pero se nos complica al no poder armar nunca la misma defensa, nos impide lograr continuidad.” Fuentes cercanas al técnico sugieren que la formación definitiva albergará una línea de cuatro con Juan Pablo Sorin como lateral izquierdo (“con él en la cancha hubiera salido otro partido, pero se nos lesionó justo”, señaló el entrenador), pero con lateral derecho más clásico: Fabricio Coloccini no lo conforma, Javier Zanetti tampoco, la solución podría ser Leonardo Ponzio, se duda de que convoque a Hugo Ibarra.
Pekerman confía en que, recuperados Roberto Ayala y Gabriel Heinze, sus zagueros predilectos, buena parte de los dramas defensivos se resolverán. Podría disponer además de Coloccini donde mejor funciona. “Confío en la capacidad de los defensores para llegar muy bien al Mundial”, apunta Pekerman, pensando también que esa capacidad le aliviará las preocupaciones que existen en torno al arco argentino.
“Esta falta de continuidad en la defensa es perjudicial para todos –opina el técnico–. Tanto el equipo como el arquero también deben acomodarse a eso.” La idea de Pekerman sería apoyar con todo a Roberto Abbondanzieri para afirmarlo en su tarea sabiendo que con la defensa resuelta, el arquero de Boca levantará naturalmente su rendimiento.
Pekerman también espera que el regreso de Javier Mascherano, que ya está entrenado, equilibre el mediocampo, y está conforme con el ensayo en la delantera, juntando a Riquelme, Messi, Tevez y Crespo. Por supuesto que no cree, como se sugirió después del partido en algunos círculos, que la apuesta ofensiva haya sido la que desequilibró al equipo. “Ellos hicieron el mayor esfuerzo posible para evitar que el equipo se desequilibrase”, opina.
El entrenador sostiene la continuidad de Crespo como el delantero físico que puede solucionar el juego aéreo en el área rival: en ese sentido es uno de los indiscutibles y, en todo caso, representa una alternativa de ataque al que pueden proponer los habilidosos Messi y Tevez, jugando corto, por abajo y con gambeta rápida. En ese sentido, ni Pekerman ni su cuerpo técnico advierten problemas.
Pekerman ya no puede probar más jugadores. Los seguirá viendo en sus clubes, aunque parece poco probable que se descuelgue con alguna convocatoria: la sensación es que la lista de los 23 saldrá de los futbolistas ya ensayados.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.