Lanús consiguió un valiosísimo punto ante Corinthians en San Pablo, en su partido de ida por los octavos de final de la Copa Sudamericana, en la que venía de eliminar a Vélez. Con el empate sin goles, el equipo de Ramón Cabrero mantiene la valla invicta en el torneo continental y guarda interesantes chances de clasificarse a los cuartos de final cuando se juegue la revancha en su estadio.

El conjunto granate jugó un primer tiempo inteligente en Brasil. Sin asumir el protagonismo para evitar sorpresas, eligió presionar en el medio, achicando espacios a los delanteros y mediocampistas de creación locales, defendiendo siempre lejos del arco de Bossio, que cuando le tocó respondió bien.

Velázquez tuvo el gol apenas comenzado el partido cuando remató violentamente un tiro libre, obligando al arquero Marcelo a esforzarse para sacar el disparo. El Corinthians inquietó durante todo ese período apenas con un cabezazo de Marinho. Le costaba llegar y cuando lo hacía no definía bien.

En el complemento, los brasileños salieron más decididos y empujaron a Lanús contra el arco de Bossio: los granates se cargaron de amarillas para frenar los avances del conjunto local. Pero aunque pasaron más apuros que en la primera parte, lograron sostener el empate.