Argentina no se libró de las lesiones antes del partido inaugural del Mundial contra Francia, el viernes, y la duda sobre la participación del apertura Federico Todeschini es un problema más para el seleccionador Marcelo Loffreda. El jugador de Montpellier, con problemas en la pantorrilla derecha, después de haberse quejado de la espalda y del muslo, fue sometido este lunes a una revisión médica que no reveló una “grave lesión”, según el portavoz de Los Pumas, Rafael Laría. “Habrá que esperar a ver cómo se desarrolla el entrenamiento del martes (por hoy)” antes de pronunciarse sobre su participación, añadió.

Todeschini no aparecía como eventual titular, donde Loffreda parece dudar entre Felipe Contepomi y Juan Martín Hernández, que acabó su temporada en el Stade Français. Pero una ausencia de Todeschini privaría a Los Pumas de un arma letal cuando de envíos a los palos se trata (ha completado con éxito sus últimas 21 tentativas con la selección) y quitará a Loffreda una nueva opción, después de las bajas de los tres cuartos José María Núñez Piossek, lesionado en los adductores en el partido de preparación contra una selección belga, y Martín Gaitán, víctima de un problema cardíaco.

Loffreda, que mantiene el suspenso sobre el tema, podría verse obligado a satisfacer a Hernández asociándolo con Agustín Pichot. Contepomi ocuparía su plaza en el centro, mientras que Nani Corle- tto pasaría del extremo a la defensa. A condición de que su muslo izquierdo, que necesitó un masaje a comienzos del entrenamiento, lo deje en paz.

Para un duelo quizá decisivo para el pasaje hacia cuartos, el objetivo mínimo de los argentinos, Los Pumas estarán privados de otra pieza clave, Gonzalo Longo. “Todas estas lesiones son un golpe duro. Pero es la regla del juego. La lesión forma parte del rugby”, reconocía Martín Durand, que debería competir con Lucas Ostiglia por un lugar como titular.

“Es duro. Pero eso nos va a permitir unirnos más, ganar en solidaridad”, añade Ostiglia. “No hay que pensar en eso. Quien sustituirá a Gonzalo (Longo) será el mejor”, insiste Ignacio Fernández Lobbe.

Los argentinos saben que para ratificar su impresionante ascenso desde hace varios años no podrán buscar excusas. No importa las dificultades, Los Pumas deberán dejar fuera o a sus anfitriones o a Irlanda en el Grupo D.

Fernández Lobbe se quejó del sistema de sorteo de los grupos del Mundial, que encuadraron a Los Pumas junto a Francia e Irlanda. “Hubiera preferido no cruzarme con Francia e Irlanda. No comprendo cómo se junta a tres grandes equipos en el mismo grupo”, declaró el jugador. “Como regalo, nos dan el partido de apertura diciendo que vamos a estar contentos. No es normal. Creo que los franceses y los irlandeses piensan de forma parecida”, añadió Fernández Lobbe.

Loffreda, que al final del torneo dejará el mando de Los Pumas para dirigir al Leicester inglés, entiende que su mundial se juega el 30 de septiembre en el Parque de los Príncipes de París. Allí deberán batir al equipo irlandés, con el que tiene un balance equilibrado de 4 victorias por lado, y que llega con algunas incertidumbres.

En los mundiales de 1999 y 2003, Los Pumas perdieron en sus primeros partidos, ante Gales en Cardiff (1823) y frente a Australia en Sydney (824). En cinco participaciones en esta gran cita, Argentina sólo pudo alcanzar los cuartos de final en 1999.