Francia se toma el partido del tercer puesto del Mundial de Rugby como una revancha de la derrota que sufriera ante Los Pumas en el partido inaugural del certamen y arrecia con el filo de las últimas declaraciones de sus jugadores. El fullback Clément Poitrenaud reaccionó con dureza a las palabras del pateador argentino Felipe Contepomi, que había afirmado el domingo que no había visto todavía el “rugby champán” francés en este mundial. “¡Justo ellos van a hablar de rugby champán! –declaró irritado Poitrenaud–. Sólo hacen mauls y patadas a la carga. Deben dejar de criticar a todo el mundo, ¡que paren de creerse campeones del mundo! No lo son ni nosotros tampoco. Arreglaremos esto el viernes”, señaló el francés, que fue suplente en el partido inaugural. Los Pumas no le respondieron: ayer se fueron de paseo con sus hijos y familiares a Eurodisney y recién hoy retomarán los entrenamientos para el último encuentro.

“Sólo hay un jugador capaz de jugar un rugby champán en los argentinos, y ése es Juan Martín Hernández –añadió el fullback del Stade Toulousain–. Después, tienen cualidades, jugadores valientes adelante, pero hay que decir la verdad: nuestro juego tal vez no sea brillante, pero el suyo es triste. Yo no digo que no vaya a utilizar el recurso del despeje de 80 metros (el viernes), pero en un momento dado hay que parar de criticar a los otros. Nosotros no lo hacemos sobre su juego.”

Los rugbiers franceses quedaron molestos tras la caída en el match inaugural, seis semanas atrás, ante lo que interpretaron fue una manera poco vistosa del equipo argentino de jugar un partido de semejante magnitud. Algunos incluso opinaron que Los Pumas “no habían mostrado gran cosa”, como Damien Traille. Ya con Eusebio Guiñazú (25 años, jugador del Agen, de la Segunda División francesa) sumado al plantel, Los Pumas pasaron el día en Eurodisney, en las afueras de París. Marcelo Loffreda anunciará hoy el equipo.