Después de las derrotas ante Alemania y Holanda, el entrenador brasileño Luiz Felipe Scolari defendió la campaña de su equipo en el Mundial: “Nosotros no estuvimos bien en el final, pero conseguimos una clasificación (cuarto lugar) y no podemos dejar de elogiar a nuestros jugadores y la forma en que jugaron, aunque hayan perdido”. Scolari estuvo lejos de realizar una autocrítica y, aunque confesó estar triste, insistió en que su equipo “no merece críticas” puesto que “no jugó mal”, ya que “en el fútbol, a veces sólo un minuto cambia un resultado”. Por último, Scolari confirmó que ya tenía acordado de antemano entregar el cargo de DT “bien sea ganando o perdiendo, y así será”.