Viernes, 7 de noviembre de 2008 | Hoy
ECONOMíA › NI EL TRIUNFO DE BARACK OBAMA NI LA BAJA DE TASAS LOGRARON REVERTIR LA TENDENCIA
Las pérdidas en Wall Street promediaron el 5 por ciento; en Europa el derrumbe fue de 7 puntos y en Tokio el índice Nikkei retrocedió 6,5 por ciento, arrastrado por un informe negativo de la automotriz Toyota.
Otra vez la realidad ensombreció las promesas de cambio. Una nueva rueda negativa en las Bolsas del mundo volvió a quitarle brillo a la elección del futuro presidente estadounidense Barack Obama y puso en la mira la próxima reunión del G-20, en Washington, para reformular el sistema financiero. Las pérdidas en Wall Street promediaron el 5 por ciento. Ni siquiera alcanzaron los recortes de tasas que llevaron adelante el Banco Central de Europa, a 3,25 por ciento, y Gran Bretaña, a 3 por ciento. En Tokio, el índice Nikkei retrocedió 6,5 por ciento, arrastrado por un informe de la automotriz Toyota que da cuenta de una reducción a menos de la mitad en su estimación de ganancias para el próximo año. La plazas europeas lograron frenar sobre el final la caída libre del comienzo. Sin embargo, la baja fue abultada en el Viejo Continente y llegó casi al 7 por ciento en promedio.
El secretario del Tesoro, Henry Paulson, manifestó su deseo de “asegurar una transición suave y eficaz” entre la actual administración y la de Obama. “Una transición metódica y calma va en el sentido del mejor interés de los mercados financieros”, estimó Paulson a través de un comunicado que difundió la Casa Blanca. Sin embargo, las cifras económicas que se publican a diario no se corresponden con la intención del secretario. Las estimaciones de que Estados Unidos sufrió pérdidas de empleos mayores a las previstas, la contracción del sector servicios en todo el planeta, las caídas en los precios de las viviendas y el fuerte retroceso manufacturero británico fueron los factores que atizaron de pesimismo la rueda.
Esta vez el epicentro de malas noticias fue Gran Bretaña. Allí la venta de vehículos registró el mes pasado el índice más bajo de los últimos diecisiete años, según la Sociedad de Manufactura Automotriz y Concesionarios británica. El informe afirma que la tendencia declinante responde a la profundización de la crisis financiera y crediticia mundial. El sector también tuvo problemas en Brasil, uno de los principales productores de automóviles (ver aparte), por lo que el gobierno de Lula da Silva salió a subsidiar esa industria. Siguiendo en Gran Bretaña, la Cámara de Comercio de las islas previó que cientos de pequeñas y medianas empresas se declararan en bancarrota antes de Navidad como consecuencia de la falta de liquidez y créditos en el sector bancario.
Para descongelar el crédito, el Banco de Inglaterra redujo las tasas de interés en 1,5 punto, al 3 por ciento, su nivel más bajo desde 1955 y el recorte más pronunciado en los últimos veintisiete años. De esa manera, la tasa rectora pasó de 4,5 a 3 por ciento, a un mes de la anterior baja de 0,5 por ciento que llevó a cabo la autoridad monetaria británica. “Observamos una degradación muy marcada de las perspectivas económicas para la economía nacional y mundial”, justificó la institución en el comunicado en que anunció la decisión.
El recorte tuvo una respuesta inmediata en la Bolsa de Londres, donde el índice principal FTSE-100 marcó ganancias de más de 100 puntos, hasta mejorar 1,9 por ciento, aunque luego se derrumbó un 6 por ciento. Tanto desde el sector industrial como del comercio salieron en sendos comunicados públicos a apoyar la decisión.
Por su parte, el Banco Central Europeo optó por bajar medio punto su tasa hasta el 3,25 por ciento. El recorte era esperado por el mercado, luego de que la Reserva Federal y el Banco de Japón hicieran lo suyo la semana pasada. La FED llevó la tasa rectora a un uno por ciento. Sin embargo, para los operadores el costo del dinero en Gran Bretaña aún es alto y la reducción no conformó. No obstante, el titular del BCE, Jean-Claude Trichet, deslizó que podría haber un nuevo retoque de tasas en diciembre próximo.
Eso explicó que continuara el derrape de las plazas accionarias europeas y luego al otro lado del Atlántico. En el Viejo Continente, el principal índice de Londres retrocedió 5,7 por ciento; de París, 6,4 por ciento; Francfort, 6,8 por ciento; Madrid, 6,3 por ciento; Milán, 5,1 por ciento; y Moscú, 6 por ciento.
Más temprano, las plazas asiáticas se derrumbaron marcando el sendero de pérdidas que seguiría el resto. Además, la caída de 6,5 por ciento de Tokio, Hong Kong cayó 7,1 por ciento; Seúl, 7,6 por ciento; Sydney, 4,3 por ciento; Shanghai, 2,4 por ciento; y Yakarta, 4,3 por ciento.
Las pérdidas también estuvieron fogoneadas por datos que llegaron desde Francia. El gobierno de Sarkozy informó que el sistema bancario europeo cuenta en sus balances con 800.000 millones de dólares de deuda vinculada con los activos de alto riesgo. “Esa cifra es una estimación británica no oficial del monto en dólares de los activos tóxicos susceptibles de afectar el conjunto del sistema financiero europeo”, indicó el palacio del Elíseo. Las pérdidas rondarían entonces una cuantía similar al megasalvataje de 850.000 millones de dólares aprobados por el Capitolio para la economía estadounidense.
En Nueva York las estimaciones preliminares sobre los datos de de-sempleo que se conocerán hoy jugaron en contra de los mercados. Los analistas estiman que en octubre se destruyeron 157.000 puestos de trabajo. Además, la productividad agrícola norteamericana se redujo en el tercer trimestre a 1,1 por ciento, menos de un tercio del período precedente. El índice industrial Dow Jones retrocedió 4,9 por ciento, mientras que el tecnológico Nasdaq perdió 4,3 por ciento. El Standard and Poor’s, que engloba a las mayores compañías de todos los sectores de Estados Unidos, se retrajo 5,1 por ciento.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.