Telecom Italia apeló la resolución de la Secretaría de Comercio que la obliga a vender sus activos en el país. Como habían anticipado las autoridades de la empresa, rechazaron la medida de fines de agosto, que ordena la desinversión y faculta a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) a fijar en un plazo de 60 días las pautas del proceso. Una investigación de la Comisión detalla el impacto que la operación habría tenido en el mercado local de telecomunicaciones, reflejando que la entrada de Telefónica de España en el capital accionario de Telecom Italia a partir de 2007 implicaba una práctica monopólica en el ya concentrado mercado de telecomunicaciones local. En su apelación, la empresa sostiene que “las amplias facultades otorgadas a la CNDC para que determine la desinversión son arbitrarias, afectan el patrimonio de Telecom Italia e implican una expropiación”. Telefónica y Telecom concentran el 90 por ciento del mercado de telefonía fija local, el 72 por ciento de los abonados minoristas a Internet y el 93 por ciento de la telefonía pública.