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La discusión por el Presupuesto 2010 incluirá una dura pelea por los recursos coparticipables de una serie de impuestos que el Ejecutivo intentará prorrogar sin modificaciones. Junto con la ley de leyes ingresaron al Parlamento la prórroga de los impuestos a las Ganancias, Bienes Personales, Ganancia Mínima Presunta, al Cheque, Cigarrillos y el Fondo para Educación y Promoción Cooperativa. Uno de los puntos de conflicto estará en la pretensión de legisladores de distintas provincias por extender la coparticipación del gravamen al Cheque, que en la actualidad se reparte en un 70 por ciento para la Nación y el resto para los distritos del interior. Diputados de la Coalición Cívica señalaron que impulsarán una reforma para gravar la renta financiera.

Según se desprende del texto elevado al Congreso, las prórrogas de estos impuestos representan para el Gobierno “recursos imprescindibles para dotar al Estado y a las jurisdicciones provinciales de los fondos necesarios para el cumplimiento de sus funciones específicas”. Por eso el Ejecutivo propone extender por diez años el actual régimen de Ganancias, Bie-nes Personales y Ganancia Mínima Presunta. El Impuesto al Cheque se prevé prorrogar por dos años y los Cigarrillos, por un año.

En el Presupuesto se proyecta una recaudación por Ganancias de 59.030 millones de pesos, una suba del 8,3 por ciento en relación con la estimada para este año. La coparticipación por este gravamen será de 18.521 millones de pesos. Por su parte, el Estado prevé recaudar por el Impuesto al Cheque 23.546 millones de pesos, con un alza del 12,7 por ciento. De este tributo se coparticiparán 3416 millones de pesos. “En las condiciones actuales no sería posible resignar recursos fiscales”, se advierte en los considerandos del proyecto.

Por otro lado, a través de Bienes Personales se estima una recaudación de 4220 millones de pesos. La coparticipación de este tributo será de 2295 millones. El total de coparticipación estimado para el año próximo –incluida la recaudación por IVA y otros tributos– será de 68.848 millones de pesos, el principal botín de algunos legisladores del oficialismo y la oposición, además de los gobernadores.

El legislador Adrián Pérez, titular del bloque de la CC en Diputados, señaló a Página/12 que “la oposición buscará la coparticipación total de los recursos del impuesto al Cheque”. Por el lado del oficialismo en el Senado, ya son varios legisladores los que reclaman una inversión de la ecuación sobre este tributo: un 70 por ciento para las provincias y el restante 30 para la Nación.

A pesar de que Amado Boudou, ministro de Economía, señaló ayer que el tema de la coparticipación “deberá ser resuelto por las provincias”, el Estado prevé, según el Presupuesto, convertirse en garante de las deudas provinciales frente a los acreedores internacionales. Para que el Ejecutivo acceda a renegociar las deudas provinciales, cada jurisdicción deberá afianzar el compromiso de pagar esa deuda cediendo recursos de la coparticipación.