La recaudación en febrero registró un alza de 20,2 por ciento frente al mismo mes de 2009, llegando a 27.377 millones de pesos. Lo informó la AFIP, en una conferencia de prensa encabezada por el titular del organismo, Ricardo Echegaray, y el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa. El incremento interanual es similar al del mes pasado –que había avanzado 20,3 por ciento–, por lo que se va marcando una tendencia para la expansión de los ingresos tributarios, en un año en que, según aseguran tanto el Gobierno como las consultoras privadas, puede haber tensiones fiscales, sobre todo si no se concreta el uso de reservas para pagar la deuda con acreedores privados. También se informó el resultado del plan de facilidades de pago para deudores morosos, con una adhesión de más de 111 mil contribuyentes.

En los dos primeros meses del año el aumento interanual fue de 20,3 por ciento. Este crecimiento supera holgadamente la pauta presupuestaria, fijada en 15,9, hecho que destacó Echegaray en su exposición. El avance en la percepción de ingresos por parte del Estado tiene que ver con el mejor panorama en la economía local, aunque también está fuertemente relacionado con la marcha de la inflación. Tomando en cuenta como referencia un alza de precios promedio que podría superar el 10 por ciento en el año, aquella pauta presupuestaria estaría recibiendo un desplazamiento alcista.

Uno de los principales impulsores de la suba en los ingresos fiscales fue el impuesto al valor agregado (IVA), que creció en términos netos un 22,2 por ciento en forma interanual, alcanzando 8240 millones de pesos. Representa el 30 por ciento de la recaudación total, apenas por detrás de las percepciones por la seguridad social. La importancia del IVA en el financiamiento del Estado denota la regresividad del esquema fiscal, dado que proporcionalmente la población que más consume es la de más bajos ingresos. Este impuesto impacta proporcionalmente más sobre los sectores desprotegidos que sobre los de más alto poder adquisitivo.

La parte del IVA que grava al consumo de bienes producidos localmente –IVA impositivo– subió 19,6, y el que tributa sobre los bienes importados creció 32 por ciento. Ambas subas se explican por la mejoría en la actividad económica, que está siendo impulsada en buena manera de parte del consumo, y por el avance de precios.

El impuesto a las ganancias recaudó 4688 millones, con un crecimiento anual de 24,9 por ciento. La AFIP resaltó que esta suba se vio impulsada por los ingresos de anticipos de sociedades y retenciones. Ganancias participó en el 17 por ciento de los ingresos totales. En tanto, el impuesto al cheque avanzó un 18,6 por ciento, alcanzando 1802 millones, lo que también demuestra el avance en la actividad.

El comercio exterior registra una recuperación desde finales de 2009, que se reflejó, especialmente vía importaciones, en el desempeño fiscal. Los derechos de importación alcanzaron 668 millones, creciendo 34,3 por ciento. Por su parte, los impuestos sobre las exportaciones llegaron a 2718 millones, un avance de 14,5. Los mayores aumentos provinieron de semillas y frutos oleaginosos y combustibles y minerales. En total, los ingresos por comercio exterior mostraron un alza de 17,9.

Los recursos provenientes de la seguridad social fueron 9139 millones de pesos, un 33,4 del total recaudado. Los ingresos presupuestarios –excluidas las obras sociales y las ART– sumaron 6881 millones, con una variación de 20,6 por ciento. Este incremento fue causado fundamentalmente por el aumento en las remuneraciones, que estuvo cerca del 17 por ciento en promedio. A la vez, agrega el organismo, por el incremento del empleo registrado y de la base imponible.

La recaudación por el impuesto a los combustibles y naftas alcanzó 520 millones, con una variación de 20,1 por ciento. El alza se produjo gracias al incremento de precios y litros comercializados.

Echegaray también informó las cifras del plan de facilidades de pago para deudores morosos que venció el pasado 28 de febrero. Obtuvo la adhesión de 111.699 contribuyentes, mientras la deuda consolidada ascendió a 7631 millones de pesos.