Las tarifas para el transporte metropolitano aumentarán a partir de mañana. Los boletos de colectivo abonados con la SUBE tendrán un incremento de entre 40 y 45 centavos, dependiendo del recorrido, y los del tren subirán entre 30 y 50 centavos para los trayectos más utilizados. Los aumentos son mayores para quienes pagan en efectivo. Jubilados, pensionados, beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo y la Asignación por Embarazo, personal de trabajo doméstico y veteranos de Malvinas, alrededor de dos millones de personas, están excluidos de las subas y continuarán abonando las tarifas vigentes cuando abonen con la SUBE. Durante los primeros 90 días, esas personas deberán acreditar su condición al subir al colectivo o tren y luego sus tarjetas estarán habilitadas automáticamente para abonar la tarifa diferenciada. Los boletos escolares y estudiantiles no sufrirán cambios. Todavía no tiene fecha, pero el próximo paso del Gobierno será asociar la escala tarifaria al nivel de ingresos de todos los trabajadores.

“El aumento equivale a lo que cuesta un caramelo”, afirmó Randazzo anoche durante el anuncio. Las subas rondan entre el 33 y el 42 por ciento, dependiendo del recorrido o ramal para los tramos más utilizados. Los boletos de colectivo que hoy cuestan 1,10, 1,20 y 1,25 peso suben desde mañana hasta 1,50, 1,60 y 1,70 peso, respectivamente. Quienes no tengan la SUBE pasarán a pagar de los 2 pesos actuales a 3,00, 3,25 y 3,50 peso, dependiendo del recorrido, con una nueva segmentación.

En los ferrocarriles metropolitanos, las tarifas mínimas de 70 y 75 centavos pasarán a 1 peso y las de 80 centavos llegarán a 1,10 peso. Sin la tarjeta, el precio subirá de 1,50 peso a 2,00 o 2,25 pesos, según el ramal. El boleto más caro de tren sin la SUBE pasará de 5,00 a 11,50 pesos, un aumento superior al ciento por ciento. En Transporte precisaron que sólo el 5 por ciento de los usuarios de transporte público no tiene la tarjeta SUBE.

La medida fue presentada por el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, como la segunda etapa de la segmentación de tarifas a los usuarios del Sistema Unico de Boleto Electrónico creado en 2009. La primera medida fue la universalización de la SUBE, al distribuir más de once millones de tarjetas. Luego, desde agosto, se decidió diferenciar las tarifas y “penalizar” a quienes no usen el boleto electrónico, y ayer se profundizó ese proceso entre los usuarios de la tarjeta. Desde la visión de Interior y Transporte, la medida “racionaliza el gasto público y permite direccionarlo hacia los sectores más vulnerables”. En la cartera que conduce Randazzo estimaron que un trabajador que utiliza el transporte público todos los días experimentará un incremento de 30 pesos por mes.

“El Estado nacional sigue pensando que el transporte es una política de redistribución del ingreso. Permite que muchos usuarios viajen a un costo accesible. El costo del boleto del colectivo en el área metropolitana sigue siendo el más bajo del país”, destacó el funcionario, quien estimó que el Estado ahorrará 107 millones de pesos mensuales en subsidios al transporte metropolitano. Los distintos subsidios al sistema de colectivos y trenes superan los 17 mil millones de pesos. Ayer, Interior y Transporte habilitó un incremento de los subsidios que otorgan a las empresas de colectivos por más de 800 millones de pesos.

Durante los próximos 90 días, los jubilados, pensionados, trabajadoras de casas particulares, veteranos de Malvinas y beneficiarios de planes sociales deberán acreditar su condición al subir al colectivo o tren para acceder a las tarifas congeladas. En el caso de los retirados bastará con los carnets del PAMI, recibos de Anses y cajas provinciales. Los beneficiarios de la AUH y la Asignación por Embarazo deberán mostrar sus tarjetas de débito, y las trabajadoras de casas particulares su recibo de sueldo. Interior y Transporte instruyó a las cámaras empresarias para que, ante la duda o falta de acreditación, cuando un pasajero solicite la tarifa diferenciada los choferes se la otorguen. En el equipo de Randazzo estiman que, finalizado el período de tres meses, los dos millones de tarjetas SUBE excluidas de los aumentos estarán habilitadas para abonar la tarifa diferenciada y ya no será necesario mostrar ninguna credencial.

A continuación se detallan algunos ejemplos concretos con los precios que deberán pagar a partir del viernes los usuarios del sistema ferroviario y colectivos:

- Sarmiento y Mitre: En las líneas operadas entre Metrovías y Ferrovías, un pasajero que viaje de Retiro a Tigre en el Mitre pasará de pagar 1,35 a 1,80 peso, mientras que quienes lleguen hasta Garín pasarán de 1,85 a 2,50 pesos. Cuando no se use la SUBE esos viajes treparán de 1,50 y 2,00 pesos hasta 3,75 y 5,00 pesos, respectivamente. El viaje entre Moreno y Once en el Sarmiento también pasará de 1,30 a 1,75 peso y la tarifa sin la tarjeta aumentará de 2,00 a 3,50 pesos. La mínima del Sarmiento pasará de 0,80 a 1,10 peso.

- Urquiza: Desde Lacroze hasta Villa Bosch el precio pasará de los 80 centavos vigentes hasta 1,10 peso y, sin la SUBE, de 1,50 a 2,25 pesos. A partir de Martín Coronado la tarifa sube de 1,10 a 1,50 peso.

- San Martín: Los pasajes que desde Retiro costaban 75 centavos para cubrir las estaciones entre Palermo y La Paternal aumentarán hasta 1,00 peso. Desde Villa del Parque hasta José C. Paz las tarifas pasan a costar entre 1,35 y 2,15 peso.

- Roca: Los servicios hasta Quilmes pasarán de 90 centavos hasta 1,20 peso, hasta Ezpeleta irán a 1,50 y hasta Tolosa, a 2,40 pesos. La tarifa mínima de los servicios eléctricos pasará de 0,8 a 1,10 peso. Los aumentos para los tramos más largos llevan las tarifas hasta valores entre 3,10 y 5,80 pesos.

- Belgrano Norte: Entre Retiro y Aristóbulo del Valle el precio pasará de 75 centavos hasta 1,00 peso. Hasta Padilla, 1,20 y hasta Villa Rosa, 2,40 pesos.

- Colectivos: Los recorridos más largos, entre 12 y 27 kilómetros, que atraviesan la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense pasarán de 1,75 a 2,35 pesos, mientras que los trayectos de más de 27 kilómetros suben de 2,00 a 2,70 pesos. Sin la SUBE el boleto máximo llega a 5,50 pesos.