El secretario de Comercio, Augusto Costa, recibió ayer a los directivos de la Unión Industrial Argentina (UIA), la Confederación General Económica (Cgera) y la Cámara de la Mediana Empresa (CAME). Fueron tres reuniones extensas por separado. Costa les planteó que, más allá de los pronósticos negativos que hacen en forma pública algunos empresarios y economistas, las condiciones estructurales para volver a crecer están dadas. También informó cambios en la resolución 142, de liquidación de divisas por exportación (ver aparte). Los empresarios se quejaron de los proyectos de ley para empoderar al consumidor, tema que seguirán debatiendo el jueves. Y repitieron sus usuales reclamos por la administración de las importaciones y las demoras en los reintegros a la exportación. Para analizar el deterioro de las variables laborales, Costa recibirá esta semana a dirigentes sindicales de la CTA y de la CGT cercana al Gobierno.

En el último tiempo, el titular de la UIA, Héctor Méndez, se cruzó fuerte con funcionarios del Gobierno. El empresario del plástico dijo a fines de julio que “en este momento la responsabilidad en el litigio con los fondos buitre recae sobre un jovencito que tiene que estar ahí luchando solo, o de una señora que está luchando sola, con todo el peso de la responsabilidad”. Al cruce le salieron, en fila, ministros, legisladores y dirigentes oficialistas. Días atrás, Méndez agregó que la situación con los buitres frena inversiones y que el tipo de cambio está subvaluado. “¿Ahora van a usar a los buitres de excusa para no invertir?”, le respondió el ministro de Economía, Axel Kicillof, secundado por el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y el ministro de Planificación, Julio De Vido.

Con ese antecedente, Augusto Costa, sin Kicillof, recibió a las entidades empresarias, en un encuentro que estaba agendado, pero que no por ello dejó de tener sabor político. “Periódicamente nos reunimos con todos los empresarios, grandes industrias y pymes del sector comercio, desde el sector primario hasta la manufactura. Esto nos permite brindar nuestra visión sobre las perspectivas económicas, escuchar inquietudes y mejorar las herramientas de gestión de la secretaría”, señaló Costa a Página/12. “Cada uno pudo exponer sus posiciones con libertad. Por supuesto, hay temas en los que coincidimos y otros que no”, indicó Méndez.

La visita más resonante, de unas dos horas, fue de la UIA, representada por el propio Méndez, los vicepresidentes Daniel Funes de Rioja y Juan Carlos Sacco; el secretario, José Ignacio de Mendiguren, y el director ejecutivo, Martín Etchegoyen. Arrancó Costa, y planteó que la economía todavía sufre las consecuencias del desequilibrio del verano. De todas maneras, dijo, hay “convergencia de precios y estabilidad económica” que permiten a los empresarios producir e invertir. Aseguró a los dirigentes patronales que el Gobierno considera que las cuestiones estructurales de la economía están en orden, más allá de las expectativas negativas.

Una de las novedades que el Gobierno informó en la reunión es el cambio en los tiempos de liquidación de las divisas de las exportaciones. Un sector del empresariado liderado por Arcor se quejaba de que el Gobierno pide que las exportaciones entre empresas vinculadas se liquiden en 30 días. Ese plazo se modifica para las firmas con casa matriz en el país (ver recuadro). También analizaron el proceso de aprobación de Declaraciones Juradas de Importación (DJAI). “Si bien mejoraron mucho, todavía falta. Nos preocupa que ahora la AFIP tenga mayor intervención. Son 20 a 30 días en la AFIP y otro tanto en Comercio, así que no podés importar un repuesto a velocidad de rayo. El esquema cambió para bien, pero no es suficiente, hay plantas que están al borde de parar por las DJAI”, dijo a este diario Juan Carlos Sacco, empresario del sector gráfico. “Hay inconvenientes puntuales, pero reconocieron que las DJAI no generaron ningún problema productivo relevante”, dijeron desde el equipo económico.

Otro capítulo del encuentro fueron los proyectos de ley enviados por el Ejecutivo para crear el “fuero del consumidor” en la Justicia y modificar las leyes de Defensa de la Competencia y de Abastecimiento. La idea de esas iniciativas es que las empresas “paguen y después reclamen”, al revés de como funciona hoy el sistema de control. “Preguntamos si esos proyectos son a libro cerrado o si se pueden debatir”, explicó una fuente empresarial. La duda viene en primer lugar de las empresas de alimentos. Por este tema, la UIA volverá el jueves a la secretaría. Desde el Gobierno quieren evitar que se opere la ley como “antiempresaria”.

Por su parte, Etchegoyen presentó un trabajo macroeconómico de la UIA que plantea opciones para mejorar la competitividad. “Es más caro un flete interno que uno externo. También nos preocupa la devolución del IVA y el reintegro a las exportaciones”, resumió Funes de Rioja.

Luego de la UIA fue el turno de los directivos de la CGE (Confederación General Económica) y por último, de la CAME. Costa repitió su presentación y aclaró que los cambios normativos en las leyes que definen las herramientas de la secretaría van a tener impacto en las grandes empresas, no en las pymes. “El secretario Costa confirmó que las DJAI se mantendrán en vigencia en los próximos dos años, así que los productos importados no podrán competir de manera desleal con la industria nacional”, indicó Ider Peretti, titular de la CGE.