ECONOMíA › ECONOMIA ESTUDIA UNA PROBABLE REDUCCION DE LA TASA A LA MITAD
Avanza la rebaja del IVA en alimentos
El Ministerio de Economía admitió ayer que analiza una rebaja de alícuotas en artículos de la canasta básica de alimentos. Ayer, el titular de la AFIP había señalado que ese organismo estudiaba una propuesta en tal sentido formulada por la Cámara de Supermercados, pero a esa presentación se sumó, además, el hecho de que la CGT planteara el tema en la mesa del Consejo del Salario, el Empleo y la Productividad, como modo de mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores. En este contexto, es probable que finalmente la conducción económica se pronuncie en favor de una rebaja de la tasa impositiva sobre una lista limitada de productos alimenticios, una vez que cuente con los análisis de impacto en los precios finales y en la recaudación tributaria.
Según había apuntado Alberto Abad, jefe de la AFIP, los productos en estudio son la yerba mate, aceites, harinas, galletitas y fideos. La medida en estudio es bajar a la mitad (10,5 por ciento) el gravamen que pesa sobre esos productos. En esa misma tasa reducida ya se encuentran las legumbres, hortalizas, frutas y carnes, en tanto el pan y la leche están exentos. Otros productos actualmente con tasa del 21 por ciento son arroz, papa, azúcar, dulces, huevos y quesos.
En las actuales circunstancias de elevada recaudación y superávit fiscal record mes tras mes, el impacto fiscal de la rebaja no sería una preocupación. En cambio, los funcionarios todavía miran con desconfianza la actitud que podrán adoptar los comerciantes una vez rebajado el impuesto sobre el precio final. La AFIP, sin embargo, ya avanzó en comprometer a los empresarios de las cadenas comerciales en una rebaja de precios en caso de que se reduzca la tasa.
Los representantes de los supermercadistas, cuya cámara preside Ovidio Bolo, advirtieron que no son formadores de precios en todos los productos y que sólo podían garantizar el comportamiento en sus propias bocas de venta. Pero también les hicieron saber a las autoridades del organismo recaudador que una rebaja en las tasas aportaría mayor equidad al mercado, ya que muchos de los pequeños comercios que le hacen competencia “trabajan en negro”.
Un día antes, el miércoles, Roberto Lavagna había anticipado, en forma muy escueta, que ya tenía decidido qué iba a hacer con el superávit fiscal: “Vamos a rebajar impuestos”, tras recordar que anteriores excedentes habían sido destinados “a los sectores sociales”. Según refirió el ministro de Economía en ese encuentro con periodistas, “estamos analizando diversas alternativas, viendo el costo fiscal y el impacto que tendrían los estímulos sobre la economía”.
En el Palacio de Hacienda existe plena conciencia de que el efecto reactivante de la reducción del IVA sobre algunos alimentos es limitado. Por otra parte, tampoco tiene un impacto mayor sobre el presupuesto familiar. Sin embargo, mayor valor se le asigna a lo que significa como señal en cuanto a la orientación que se le busca dar al sacrificio fiscal. Es una respuesta exactamente contraria a la reclamada por los sectores exportadores que demandaban una reducción de las retenciones a la exportación.