ECONOMíA › ROBERTO LAVAGNA SE REUNIO CON
LA UIA PARA NO HABLAR DE SALARIOS
La política de manejar expectativas
El ministro reprendió a sus aliados de la industria por la relación con la CGT que alentaba la indexación de la economía.
Por David Cufré
“Aunque parezca antipático, prefiero preservar la estabilidad”, les dijo ayer Roberto Lavagna a los principales dirigentes de la Unión Industrial Argentina, quienes acudieron al Palacio de Hacienda para recomponer su relación con el ministro luego de haber sido reprendidos por él por negociar con la CGT un aumento de salarios. “Reconozco el buen espíritu de su iniciativa, pero lo cierto es que no obtuvieron resultados concretos y la continuidad de las discusiones estaba afectando las expectativas”, siguió el jefe de Economía. “El Gobierno será muy contundente para frenar cualquier atisbo de rebrote inflacionario”, completó, categórico. Lavagna no mencionó a Néstor Kirchner, pero los empresarios comprendieron que tiene todo su respaldo en este tema. Después de acordar que nadie hablará más públicamente de aumentos de sueldos, Lavagna les anticipó a sus visitantes un paquete de medidas en favor del sector fabril.
La reunión se organizó luego de que el titular de Hacienda protestó en televisión por “el acuerdo de cúpulas” que estaban gestando la UIA y la CGT para recomponer salarios. Los industriales consideran a Lavagna como su principal aliado y quedaron descolocados con sus palabras. Sobre todo, porque su intención era bloquear “aumentos desmedidos”, más que estar preocupados por mejorar los ingresos de sus trabajadores. Daniel Funes de Rioja fue el encargado de explicárselo al ministro. También le dijo que nunca se pensó en ajustar los haberes en función de la inflación, sino que se buscaba promover acuerdos por sector en función de la productividad de cada uno de ellos.
La delegación empresaria estuvo integrada por dirigentes de excelente relación con Lavagna, como José De Mendiguren y Luis Betnaza (Grupo Techint). Estuvieron presentes todos los integrantes de la mesa chica de la UIA: su actual titular, Alberto Alvarez Gaiani; el presidente electo, Héctor Méndez, y Federico Nicholson, Juan Carlos Sacco, Adrián Kaufman y Héctor Massuh. La conversación sobre la evolución de los salarios derivó en una explicación sobre el aumento de la inflación. El ministro volvió sobre el problema de “afectar las expectativas” con señales de indexación generalizadas. Pero afirmó que las gestiones del Gobierno para controlar la situación están dando resultado y los precios se irán estabilizando.
Los empresarios aceptaron sus argumentos, pero uno de ellos recordó a Página/12 que el propio Lavagna amenazó con aumentos generalizados por decreto a fines de noviembre pasado, en el cierre del Coloquio de IDEA en Mar del Plata. También señaló que el ministro estuvo de acuerdo con los decretos anteriores y que entonces decía que no eran inflacionarios. De hecho, en 2003 y 2004, cuando se aplicaron los aumentos, la inflación fue de 3,7 y 6,1 por ciento, respectivamente. El dirigente fabril justificó de ese modo la negociación que la UIA encaró con la CGT. En el fondo, su reclamo era contra la política de ingresos del Gobierno.
Otro tema que los industriales le plantearon a Lavagna fue su preocupación por el proyecto de ley de riesgos del trabajo que elabora la cartera laboral. “Aumentará excesivamente los costos laborales”, adujo Funes de Rioja. Pero los empresarios no estaban en posición de hacer grandes reclamos. Por el contrario, le repitieron que la UIA apoya decididamente su gestión. Los elogios se multiplicaron luego de que Lavagna y su flamante secretario de Industria, Miguel Peirano, les adelantaron un paquete de medidas en favor del sector. Ellas son:
- Las pymes localizadas en zonas con indicadores socioeconómicos por debajo del promedio se beneficiarán con el subsidio del 50 por ciento de la tasa de interés de los créditos que tomen. Para el resto del país, el beneficio es del 25 por ciento.
- Se analiza la eliminación de las retenciones para los productos industriales que no sean insumos de otros bienes. Se suprimirá el impuesto en las exportaciones adicionales respecto del nivel base del año pasado.
- Extensión de la financiación para el pago de impuestos atrasados a 120 cuotas.
- Se acelerará la devolución de saldo técnico de IVA inversiones por 500 millones de pesos, mitad para pymes y mitad para grandes compañías.
- Se enviará un proyecto de ley al Congreso para ampliar el cupo de subsidios a las inversiones, a través de la amortización acelerada de bienes de capital y la devolución del IVA.
- Plan para promover el equipamiento con computadoras a bajo costo, financiadas por el Banco Nación.