ECONOMíA › POCOS NUEVOS TRABAJOS, PERO EN BLANCO
Crece, pero lento
Si bien los datos de creación de empleo del Indec no fueron muy alentadores, la encuesta de Trabajo reflejó una mejora en la calidad por un progresivo blanqueo del trabajo en negro.
El Gobierno difundió el adelanto de la Encuesta de Indicadores Laborales correspondiente a julio, que registró un aumento del 0,5 por ciento con respecto al mes anterior y del 8,9 por ciento interanual. El indicador, que refleja la situación del empleo privado formal en los principales aglomerados del país, evidencia que el trabajo registrado crece a mucha más velocidad que el empleo global, lo que denota un progresivo blanqueo de la economía y, en consecuencia, una mejora de la calidad del empleo. Los datos no ocultan, sin embargo, el freno en la creación de empleo global reflejado por la Encuesta Permanente de Hogares del Indec.
Luego de reunirse con el presidente Néstor Kirchner, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, pudo difundir las buenas nuevas. Aunque la creación global de empleo se frenó regresando a sus niveles de crecimiento históricos, el empleo registrado o en blanco siguió el camino inverso. Mientras en enero pasado crecía a un 6,2 por ciento interanual, en marzo al 7,4 y en mayo al 8,8, en julio volvió a crecer registrando el citado 8,9 por ciento.
El ministro Tomada consideró que el “incremento del empleo formal tiende a proyectarse en el tercer trimestre, lo que nos permite inferir que hay un nuevo patrón de crecimiento de la economía, con una suba sostenida del empleo que apunta a ampliar las posibilidades laborales”.
En la EPH, el empleo sólo creció, en el segundo trimestre con respecto a igual período del año anterior, el 3,6 por ciento. La elasticidad empleo-producto, esto es, cuánto crece el empleo por cada punto de crecimiento de la economía, se redujo en el mismo período de 1,0 a 0,4, lo que regresó el indicador a sus niveles históricos.
Tomada también afirmó que las mediciones en lo que resta del año seguirán la tendencia positiva. “Tenemos que tener en claro que hay un proceso de crecimiento del empleo que se consolida y se mantiene en forma ininterrumpida desde hace 33 meses”, recordó. “Esta fuerte creación muestra cómo uno de los motores del crecimiento es el fortalecimiento del proceso de reindustrialización”, agregó.
Aunque el empleo formal en la industria creció a un considerable 7,9 por ciento, y en comercio y servicios el 7,6, la suba más fuerte se notó en la construcción, donde la expansión interanual de julio fue del 28,7 por ciento. La evolución de este sector fue notable. El empleo en blanco en la construcción pasó de un piso de 119 mil puestos de trabajo en julio y agosto del 2002 a 283 mil en junio pasado. Fuentes de la Uocra consultadas por este diario atribuyeron sólo un 10 por ciento de este crecimiento al blanqueo de trabajo existente, el resto responde a expansión genuina. Los datos se corresponden con la evolución registrada por la actividad de la construcción en la medición del Producto.
El especialista en economía laboral Ernesto Kritz explicó a este diario que la mejora en la calidad del empleo-producto de la mayor registración respondió a tres factores. La mayor actividad de inspección del Ministerio de Trabajo, la baja del costo laboral y, especialmente, la baja de evasión fiscal en el IVA, es decir, el mayor blanqueo de la economía, producto combinado de la mejora de la situación económica y de la mejor administración tributaria.
En términos regionales, Tomada destacó que la suba del empleo “tuvo su anclaje en la provincia de Buenos Aires, logrando así un mayor impacto” en los parámetros globales. En concreto, el crecimiento interanual del Gran Buenos Aires fue del 9,2 por ciento y en el Gran Córdoba del 12,6 por ciento.