ECONOMíA
Sectores industriales piden garantías en el Mercosur
En un encuentro con dirigentes de diversos rubros industriales, Néstor Kirchner y Felisa Miceli garantizaron que no se dejarán de lado mecanismos de protección en el comercio intra Mercosur.
La reunión entre un grupo heterogéneo de empresarios favorecidos por la política de dólar alto con la cúpula del Ministerio de Economía y el presidente Néstor Kirchner, cuyo objeto, según el Palacio de Hacienda, fue tratar una serie de medidas vinculadas con inversiones y bienes de capital, se convirtió en escenario para que el Gobierno reexponga su política de precios para después del 31 de enero.
La política económica seguirá centrada en evitar que el crecimiento recaliente los precios. Por mucho tiempo no existirán reuniones entre gobierno y empresarios en las que el tema precios sea dejado de lado. El encuentro mantenido ayer entre empresarios metalúrgicos, de la industria automotriz, gráfica, maquinarias agrícolas, calzado e indumentaria con el presidente Kirchner, la ministra Felisa Miceli y el secretario de Industria, Miguel Peirano, no fue la excepción.
De acuerdo con fuentes oficiales, el tema convocante fue la decisión del Consejo del Mercado Común del Mercosur de mantener hasta el 31 de diciembre de 2008 los regímenes de importación de bienes de capital. En el caso de Argentina esto significa que seguirá la importación con arancel cero, pero en coexistencia con un reembolso del 14 por ciento sobre las ventas de los productores nacionales. De esta manera se logra el doble propósito de favorecer la inversión manteniendo bajos los costos (arancel cero), pero sin afectar la competitividad de los bienes producidos localmente (reintegro del 14 por ciento).
Otras medidas tomadas por el Consejo fueron acordar una lista de items que serán exceptuados del pago del Arancel Externo Común y la creación de un Grupo de Alto Nivel sobre inversiones. La lista, también vigente hasta fines de 2008, deberá ser definida por cada país y, según Economía, permitirá “mantener la reducción en los niveles arancelarios de insumos fundamentales para el proceso productivo que no son producidos en el país”.
Aunque buena parte de estos anuncios habían sido largamente esperados por los empresarios convocados, la conversación derivó rápidamente a temas más calientes. Según declararon los ejecutivos tras el encuentro, el Gobierno se comprometió a mantener el dólar en torno de un valor nominal de 3 a 3,05 pesos, lo que presupone la continuidad de una lenta revaluación del peso a través de la inflación y una señal a los empresarios de que, cuanto más remarquen, más rápido perderán su competitividad externa.
Miceli sostuvo, por su parte, que la estrategia de contención de precios irá más allá de los acuerdos actuales. El objetivo del Palacio de Hacienda es darles a estos acuerdos un carácter sistemático mediante una estructura de reuniones sectoriales periódicas. Este modelo es similar al que se utiliza actualmente en Francia, donde Estado y privados se reúnen cada 3, 6 o 12 meses a fin de consensuar la evolución de los valores de una lista de productos, entre ellos los más sensibles dentro de la canasta de consumo. Este sistema convivirá, además, con el continuo monitoreo de la cadena de valor.
Kirchner también aclaró a los industriales que todos los incentivos a la producción que aplica hoy el Gobierno están sujetos a que inviertan y abastezcan el mercado interno con precios adecuados. “El Presidente nos dijo que el Gobierno tiene las retenciones y otros impuestos que no van a dudar en aplicar si ven malos comportamientos del otro lado”, declaró Mario Polijronópulos, presidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Adimra). En la misma línea se expresó el titular de la Cámara de la Industria del Calzado, Alberto Sellaro. “La ministra tiene las armas para actuar y las va a usar con los sectores que no colaboren”, reseñó. “Nos instaron a tratar de cuidar los precios, porque es en bien de todos y es lo único que garantiza la continuidad del crecimiento”, completó el dirigente.
Para el presidente de la Asociación de Fabricantes de Autocomponentes (AFAC), el encuentro fue “un intercambio muy inteligente sobre cómo armamos una política de largo plazo para el sector industrial (...), se habló de cómo resolver el problema de la inflación sin apelar a las restricciones y los frenos que hubo en el pasado, es decir, sin usar herramientas ortodoxas que frenen la reactivación”, concluyó.