ECONOMíA › LOS EMPLEADOS PUBLICOS LIDERARON LA SUBA, CON UN 28,4 POR CIENTO

El salario resiste a la inflación

El ingreso de los trabajadores creció 22,7 por ciento en 2007. Superó a la inflación oficial y dio pelea a las cifras privadas.

Los salarios aumentaron 1,4 por ciento en diciembre, acumulando una suba de 22,7 por ciento en todo 2007, según informó ayer el Indec. Los empleados públicos tuvieron un incremento de 1,3 por ciento en el mes y cerraron el año liderando el ranking, con una mejora de 28,4 por ciento respecto del año anterior. En segundo lugar se ubicaron los informales, con una suba de 1,8 y 24,1, respectivamente. Mientras que los trabajadores del sector privado registrados consiguieron un 1,3 por ciento en diciembre, llegando a 20 por ciento en la comparación interanual. Las cifras evidencian una mejora del salario real con relación a la inflación oficial que registró el Indec el año pasado (8,5%), aunque el margen disminuye significativamente, o directamente desaparece, cuando se compara con las estimaciones privadas del mismo período (entre 15% y 25%).

La situación es distinta cuando se compara la evolución de precios y salarios desde la devaluación de enero de 2002. Los trabajadores registrados del sector privado acumulan una suba salarial de 171,4 por ciento, contra una inflación de “apenas” 107,5 por ciento en igual período, mientras que los estatales y los informales lograron una mejora en su ingreso de 86,9 y 96,8 por ciento, respectivamente, quedando relegados en la carrera contra los precios.

El período post-devaluación muestra dos etapas bien diferenciadas al analizar la evolución de los precios respecto de la inflación. En 2002, el conjunto de los trabajadores sufrió una reducción significativa de su salario real, debido a la fuerte suba del costo de vida. En el caso de los trabajadores registrados del sector privado, los aumentos no alcanzaron a compensar la suba de precios. El ingreso de los estatales permaneció congelado, perdiendo aún más que los registrados, mientras que los informales se llevaron la peor parte, pues el alto porcentaje de desocupación los obligó a aceptar una reducción de su salario nominal con tal de conservar su empleo.

El segundo período comenzó a fines de 2003 y estuvo caracterizado por la recuperación económica, la baja de la desocupación y una mejora generalizada del salario real. Los primeros en notarla fueron los empleados registrados. Unos pocos meses más tarde se extendió a los informales, ya que cuando el piso salarial de los empleados en blanco sube, termina beneficiando indirectamente a los que se encuentran en negro. En último lugar se ubicaron los estatales, quienes recién lograron los primeros aumentos de sueldo en 2005.

En 2006, todos los salarios le ganaron a la inflación, pero el ranking estuvo liderado por los informales, seguidos por los registrados y los estatales, en ese orden. La revancha del empleado público llegó el año pasado, dejando en segundo lugar a los trabajadores en negro y últimos a los registrados, en un contexto de mejora generalizada de los ingresos. No obstante, la recuperación del salario real quedó empañada por la intervención que llevó adelante el Gobierno en el Indec.

Los trabajadores descreen de la inflación oficial y las estimaciones privadas muestran una fuerte disparidad que oscila entre 15 y 25 puntos, incrementando la confusión. Al haber dañado la credibilidad del Indec, el Gobierno terminó perjudicándose a sí mismo porque la suba del salario real podría haber sido un buen dato para publicitar la gestión del ex presidente Néstor Kirchner, pero ahora hasta los que mejoraron su poder de compra se quejan porque desconfían de todas las estadísticas oficiales.

Compartir: 

Twitter

El salario de los privados registrados acumula una suba de 171,4 por ciento desde 2001.
Imagen: EFE
 
ECONOMíA
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.