Los distintos cortes de rutas que vienen realizando los ruralistas desde hace doce días han producido un desabastecimiento de carnes tanto en Capital Federal como en el Gran Buenos Aires. Los faltantes se registran fundamentalmente en los cortes económicos y ya trajo como consecuencia que algunas carnicerías no abrieran en los últimos días. De mantenerse las protestas, se pone en duda el abastecimiento al mercado interno de los productos lácteos, cuya escasez podría notarse en el transcurso de esta semana.

Fuentes del sector cárnico afirmaron a este diario que en las cámaras de los frigoríficos no hay stock de hacienda faenada. Esto quiere decir que la cantidad de días de abastecimiento del producto, en caso de que no se reestablezca la actividad, quedaría librada a la cantidad de carne almacenada por las bocas minoristas. En este punto, la situación es divergente según el tamaño del comercio o supermercado. Los supermercados chinos atraviesan “una situación complicada”, según el titular de la Cámara de Autoservicios y Supermercados de Propiedad de Residentes Chinos, Miguel Angel Calvete. “Ya se registra desabastecimiento de los cortes más económicos en Capital y Gran Buenos Aires, aunque es más aguda la situación en el conurbano, donde la falta del producto es cercana al 80 por ciento de los comercios de nuestra cámara. Esto hizo que algunas carnicerías no abrieran en los últimos días. Sólo hay stock en ciertos lugares, pero principalmente de los cortes más caros como el lomo y el peceto”, señaló Calvete a Página/12.

Al cierre de esta edición, no había registrada ni una jaula de hacienda ingresada al Mercado de Liniers, ni siquiera las tropas que se rumoreaba mandarían las Fuerzas Armadas para poner en movimiento las operaciones en ese mercado concentrador.

El caso de la leche es diferente. Fuentes del sector aseguraron a este diario que, por el momento, no hay faltante de materia prima en la industria, dado que los piquetes en las rutas permiten la entrada de la leche cruda a las usinas lecheras. Sin embargo, los cortes sí impiden el paso de los productos ya manufacturados hacia los centros comerciales, abriendo la posibilidad de problemas de oferta de los mismos. “Dejan pasar la leche cruda desde los tambos para no tener que cargar ellos con el costo de tirarla. Pero luego no permiten que los camiones pasen con la mercadería manufacturada lista para ser distribuida, de manera que el costo lo carga la industria. Los camiones vuelven a la usina y aumentan los stocks de estos productos en la empresa y no llega al comercio”, aseguraron fuentes del sector lechero. “Aún no hay denuncias de faltantes, pero mañana (por hoy) va a estar complicado cuando la gente vuelva de vacaciones y quiera reponer los productos lácteos básicos”, adelantaron fuentes del sector a este diario.

En cuanto a aceites y harinas, hace un mes se habían registrado problemas de abastecimiento del comercio minorista, pero la situación se normalizó hace quince días. Sin embargo, este cuadro de estabilidad volvió a verse afectado por los cortes de las rutas de las dos últimas semanas. “No llega a haber desabastecimiento, pero sí una retracción de la oferta de entre 30 y 40 por ciento. De todas formas, la situación se está regularizando”, aseguró Calvete. Por su parte, el titular de la Asociación de la Industria Molinera, Alberto España, negó que hubiera problemas en la distribución de la harina como en la recepción de cereales.