Sábado, 11 de octubre de 2008 | Hoy
ECONOMíA › MARCHAS FRENTE A LA SEDE DE LOS ORGANISMOS, EN MEDIO DE LA CRISIS
Por Sebastián Premici
Desde Washington
En Estados Unidos no usarán el ruido de los bombos para llamar la atención ni cortarán rutas ni calles en sus reclamos. Sin embargo, las protestas existen. Basta recordar las manifestaciones de Seattle bajo la consigna “Otro mundo es posible”. Salvando las distancias y la magnitud de los acontecimientos, los funcionarios que asisten a la reunión anual del FMI no están solos. Por las calles circulan pequeños grupos de personas (entre dos y tres integrantes) con carteles, volantes, incluso se pasean en bicicletas por la puerta del Banco Mundial gritando consignas antiglobalización. Así lo están haciendo las organizaciones Code Pink, LaRouche (la organización civil del economista Lyndon LaRouche), entre otras.
Por la puerta del Banco Mundial, sobre la Avenida Pennsylvania al 1800, una pequeña bicicleta de color rosa pasa raudamente. En ella va montado Henry Paulson (titular del Tesoro norteamericano), arrojando dinero a todos los que pasan por ahí. “I take your money, stupid”, grita antes de que un guardia del banco “disuada” su actitud. El grito del falso Paulson no es más que una forma de decir a todos los que entran al Banco “nos están robando”.
Los diferentes movimientos sociales que están protestando intermitentemente frente a los edificios del FMI o el Banco Mundial denuncian que el plan de rescate ideado por George Bush que contempla fondos por 700.000 millones de dólares “no es más que un paquete para salvar a sus amigos de Wall Street y no a las personas comunes”.
“Hay que rehacer todo el sistema nuevamente”, dice Medea Benjamín, de la organización Code Pink. Esta asociación civil también apunta a concienciar sobre los efectos del cambio climático. Por eso montaron frente al edificio del Banco Mundial varios barriles de petróleos, pintados de verde, ironizando sobre el anuncio que hizo la entidad que conduce Robert Zoellick de crear un fondo para el cambio climático. Básicamente, los manifestantes dicen que “esa plata también será para los amigos de la entidad”.
En la esquina de Pennsylvania, una señorita sostiene un cartel que dice “¿Quién será el próximo?”. Para dar una idea de la respuesta, aparecen los nombres de los diferentes bancos que ya fueron nacionalizados o comprados por otras entidades.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.