El ex presidente Kirchner piensa que el plan keynesiano que el Gobierno quiere impulsar tendrá que afrontar dos obstáculos. El primero es contrarrestar las expectativas negativas que, según el ex primer mandatario, generan los pronósticos agoreros de los economistas neoliberales con mayor exposición mediática y los medios de prensa “opositores”. La otra es afrontar los embates de los sectores económicos concentrados que “quieren descargar el peso de la crisis en la población y seguir manteniendo las formidables utilidades que venían consiguiendo, aun en medio de la tormenta”.

Uno de los sectores que en su opinión está sacando ventaja de la crisis es el financiero, que aumentó las tasas de interés sin que medie una crisis de liquidez que lo justifique. En dos meses el spread entre las tasas a que se fondean los bancos y las que cobran por sus préstamos subió del 10 al 25 por ciento. Cerca del ex presidente opinan que se debe impulsar a los bancos a “bajar las tasas de interés y volcar más dinero al circuito productivo”.

Otro sector que Kirchner piensa que volverá al ataque es el campo. “Cuando se calmen los ruidos financieros internacionales van a querer impulsar un nuevo lockout”, señaló. Aunque los precios internacionales de los commodities agropecuarios aún se mantienen en niveles similares a los de mediados de 2007 y la cosecha 2008/2009 se estima no sufrirá una reducción mayor al dos por ciento, los dirigentes patronales del campo siguen exigiendo una rebaja de las retenciones a las exportaciones de granos, una medida que en el Gobierno no están dispuestos a tomar.

Por último, el sector industrial se diferenció fuertemente del Gobierno en los dos comunicados que difundió la Unión Industrial (UIA) acerca de su oposición a la estatización del sistema previsional. Kirchner piensa que esta “sobreactuación” sobre un tema que “no los afecta directamente” y las constantes amenazas de suspensiones y despidos de personal son una forma de presión para que el Gobierno eleve fuertemente el precio del dólar. Según el ex presidente, una suba como la que pretenden generaría inflación y así se condenaría a la población a pagar el costo de la crisis.