La delegación argentina, que participó en Washington de la Asamblea conjunta del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, emprendió anoche su regreso a la Argentina con la promesa de préstamos para obras públicas y la satisfacción de haber tenido un guiño de parte del próximo titular del organismo, Dominique Strauss-Kahn, de que el FMI intentará facilitar un acuerdo con el Club de París.

Este fue quizás el principal rédito con el que vuelve el grupo local, que fue encabezado por el ministro de Economía, Miguel Peirano y el presidente del Banco Central, Martín Redrado. La reunión con el sucesor de Rodrigo Rato, a partir del 1o de noviembre, tuvo lugar el domingo y, en ella, Strauss-Kahn habría hecho saber la intención de analizar una alternativa para que Argentina pueda avanzar en la refinanciación de su deuda con el Club de París, por 6200 millones de dólares, sin estar obligada a obtener un acuerdo que someta al país a un monitoreo estricto de parte del FMI.

Un acuerdo con el Fondo es la condición exigida por aquel grupo acreedor para poder avanzar en una refinanciación de los pasivos pendientes. Sobre esta base, una de las alternativas que se está considerando para respetar esa pauta sin sujetar a la Argentina a los controles estrictos –de los que se quiso liberar cuando canceló íntegramente su deuda con esa entidad– es la obtención de una línea de préstamos menos restrictiva, como la Ral (Reserve Augmentation Line).

La agenda del grupo argentino también incluyó un encuentro con el secretario del Tesoro estadounidense, Henry Paulson, quien agradeció el apoyo a la iniciativa de ese país de condonar la deuda de Liberia, una de las naciones más pobres del mundo. Pero los funcionarios locales también se reunieron con la vicepresidenta del Banco Mundial para América latina, Pamela Cox, y el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno.

Con la funcionaria discutieron el otorgamiento de un préstamo por más de 1000 millones de dólares para financiar proyectos como la ruta de circunvalación de Rosario y el saneamiento del Riachuelo. Con el principal del BID analizaron una línea especial por 300 millones de dólares para préstamos a pymes. El periplo también incluyó encuentros con los ministros de Economía de México, Agustín Carstens, y Brasil, Guido Mantega, con quien analizaron el lanzamiento del Banco del Sur.