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El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, conmemoró ayer el noveno aniversario de los atentados del 11/9 y afirmó que su país nunca flaqueará en su defensa. Obama, quien depositó flores en el Pentágono, edificio en el que se estrelló uno de los aviones secuestrados y donde murieron 189 personas, aseguró ayer por vía radial que la nación hace “una pausa para recordar un día que sometió a nuestro país a prueba”.

El presidente mantuvo un minuto de silencio en la Casa Blanca a las 8.46 local, la misma hora en la que, el 11 de septiembre del 2001, el primero de los cuatro aviones secuestrados por extremistas islámicos se estrelló contra la torre norte de las Twin Towers.

“Este es un momento difícil para nuestro país, y a menudo en tales momentos hay quienes tratan de generar amargura, de dividirnos en base a nuestras diferencias, de cegarnos de lo que tenemos en común”, alertó. El presidente también se sumó en Washington a la jornada de servicio comunitario instaurada en esta fecha para recordar los atentados del 2001.

“Se perdieron casi 3000 vidas en el ataque más mortífero de nuestra historia contra el territorio estadounidense”, aseguró Obama en su mensaje. “Nunca olvidaremos las imágenes de los aviones que desaparecían dentro de los edificios, las fotos colgadas por las familias de los perdidos, nunca olvidaremos la ira y tristeza que sentimos, y aunque han transcurrido nueve años, el tiempo nunca disminuirá el dolor y la pérdida en la conciencia nacional”, afirmó el mandatario estadounidense.

“Todos los años en esta fecha renovamos nuestra determinación contra quienes cometieron este acto bárbaro de terrorismo y continúan confabulando contra nosotros, pues nunca flaquearemos en la defensa de esta nación”, agregó.

Por primera vez, a nueve años de los ataques, en la Zona Cero emergen los primeros cimientos de los futuros rascacielos. Ya están completos casi cuarenta pisos del One Wtc, la futura torre más alta de la ciudad y de Estados Unidos, de unos 1776 pies, equivalentes a 451 metros.

Por su parte, la esposa del actual mandatario rindió homenaje a las 44 víctimas fatales del avión secuestrado que cayó en Pensilvania el día de los atentados. “Ese día, ciudadanos comunes provenientes de todas las categorías sociales se encontraron de golpe en una situación de combate”, señaló. Durante el acto, la primera dama dijo que el memorial dedicado a las víctimas del vuelo “asume un significado particular por todos aquellos que fueron salvados por el coraje de 40 pasajeros”.

Según informes de la seguridad local, el avión United Airlines fue desviado por los pasajeros que forcejearon con los islamistas, hecho que provocó la caída.