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Las protestas en España contra el ajustazo de Mariano Rajoy alcanzaron a la televisión de Valencia. El ánimo de los trabajadores se encendió después de que la dirección de RTVV informara a los sindicatos del comité de empresa su intención de despedir a un máximo de 1295 trabajadores de la televisión pública valenciana. Esta cifra supone más del 75 por ciento de la plantilla actual, que se eleva, según datos de la propia empresa, a 1695 trabajadores. Por eso, un grupo de trabajadores interrumpió la transmisión en vivo del noticiero del mediodía y, como respuesta, la policía autonómica ingresó al estudio de emisión de Canal 9, sede de la televisión pública valenciana, para desalojarlos. El diario El País de España informó ayer que los agentes, según fuentes sindicales, entraron en el estudio del informativo con el fin de desalojarlo y accedieron a la zona desde la que se emite la señal, con el fin de “garantizar” la emisión. En las puertas de RTVV se apostaron, además, varias patrullas. Según el diario español, la deuda actual de RTVV asciende a los 1300 millones de euros.

Vestidos de civil, los agentes de la policía de la Generalitat llegaron a la sede de RTVV luego de recibir una denuncia por la interrupción de la transmisión. Los policías les dieron 20 minutos a los trabajadores para desalojar el set de televisión y advirtieron que en caso de no hacerlo, comenzarían a identificarlos uno por uno. Finalmente, los trabajadores no fueron identificados ni se produjeron detenciones en el estudio. Desde los sindicatos salieron a denunciar que la seguridad del edificio se reforzó con la presencia de seguridad privada. La emisión del programa En connexió también fue interrumpida por los trabajadores, pese a la amenaza de la policía de presentar denuncias.

Con el autismo que domina la televisión española, la programación regresó con normalidad a las 19 (hora local), con la emisión de un western. Sin embargo, en el informativo de la noche (repetición del de las 20) se volvió a repetir el mensaje que aparecía en la pantalla en el noticiero de las 14: “Canal 9 no puede ofrecer en estos momentos su programación habitual por motivos del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a RTVV. Disculpen las molestias”. Cerca de las 20, la dirección de Radiotelevisión Valenciana anunció “la apertura de expedientes a todos los trabajadores que, como medida de protesta ante el anuncio de la presentación del ERE del Grupo RTVV, han interrumpido hoy el normal desarrollo de la emisión de Canal 9 durante la primera edición del Noticies 9”.

El comunicado agregó: “Igualmente, RTVV está analizando los hechos acaecidos, por si los mismos fueran constitutivos de algún tipo de ilícito penal, en cuyo caso el ente se vería obligado a ponerlo en conocimiento de las autoridades judiciales competentes”. La dirección justifica las medidas porque “la actual estructura, diseñada en los ’80, es imposible de mantener”. La intención de RTVV, según la dirección, es que la institución se mantenga con una plantilla de 400 trabajadores. El País afirma que, en los últimos años, los ejercicios económicos se cerraron con pérdidas de unos 300 millones de euros, mientras la audiencia no dejó de bajar.