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El gobierno brasileño de Luiz Inácio Lula da Silva firmó un acuerdo con el centrista y poderoso Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), que apoyará en el Congreso la aprobación de las reformas tributaria y previsional. El acuerdo incluye el nombramiento del senador pemedebista Amir Lando, como el futuro líder de la bancada del gobierno en el Congreso. Los sectores más radicales del oficialista Partido de los Trabajadores (PT) se oponen a las reformas y también son contrarios a las alianzas con el PMDB.
El senador Lando señaló que “el PMDB tiene posiciones muy cercanas a los propósitos del gobierno de Lula e históricamente defendió posiciones muy parecidas. Eso nos da tranquilidad para servir a un proyecto que representa también nuestros sueños y nuestro deseo de construir una nación libre, independiente y justa”. Indagado sobre la posibilidad de que el PMDB pase a formar parte, formal de la bancada oficialista, el senador enfatizó que eso podría ocurrir muy pronto: “Los novios están en la iglesia, el sacerdote ya está celebrando la misa, ahora el casamiento sólo dejará de ocurrir si alguien se opone”.
El noviazgo comenzó a poco de iniciado el mandato de Lula, en marzo último, cuando los líderes del PMDB en el Congreso y los cinco gobernadores de Estados brasileños vinculados con el partido decidieron apoyar las propuestas elevadas al Congreso por el mandatario, pero sin integrar oficialmente la bancada progubernamental. Con 70 diputados y 21 senadores, el PMDB es la tercera fuerza en Diputados y el bloque más numeroso en senadores, es decir, tiene una de las mayores bancadas en el Congreso. Su apoyo fortalece el gobierno de Lula da Silva, quien, pese a su amplio triunfo en las elecciones presidenciales de octubre de 2002, no tiene mayoría absoluta en la Cámara de Diputados ni en el Senado.
Según los analistas, una alianza con el PMDB es esencial para la aspiración de Lula de aprobar, hasta diciembre, los proyectos de reforma de los sistemas tributario y previsional y la propuesta de autonomía del Banco Central. Por tratarse de enmiendas a la Constitución, esas propuestas requieren del apoyo del 60 por ciento de los diputados y de los senadores, en dos rondas de votación. El gobierno goza de la amplia aprobación de su iniciativa. Según arrojó un reciente sondeo de Ibope, el 78 y 68 por ciento respaldan respectivamente la reforma previsional y tributaria.
El respaldo del PMDB aumenta las posibilidades de aprobación de la reforma del sistema de pensiones de los funcionarios públicos, que enfrenta dura oposición por parte del conservador Partido del Frente Liberal (PFL) y del “ala radical” petista. Según Amir Lando, el PMDB otorgará pleno apoyo al proyecto elevado por Lula, que propone, entre otras cosas, cobrar aportes financieros a los servidores públicos jubilados. “Nosotros tendremos que ayudar, sobre todo en el sentido de otorgar más trasparencia a la situación del sistema previsional”, expresó.