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Los autores de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid tenían un plano de la Estación Central de trenes de Nueva York con “anotaciones precisas” sobre un ataque, afirmó ayer el diario español El Mundo. Sin embargo, ayer las autoridades norteamericanas dijeron que no hay nada que indique que representaron una amenaza inminente. Dos semanas después de los atentados contra cuatro trenes suburbanos en Madrid, que causaron 191 muertos y 1900 heridos, la policía halló en un departamento del barrio madrileño de San Blas, donde vivía Mouhannad Almallah Dabas, de 41 años y origen sirio, un disquete de PC que contenía el plano de la estación ferroviaria de la Gran Manzana, efectuado a mano.
El disquete, que incluía dibujos hechos a mano y “otros datos técnicos muy especializados”, formaba parte de una serie de objetos incautados por la policía durante allanamientos efectuados entre el 24 y el 26 de marzo, pero debido a los numerosos datos sumamente técnicos que contenía el disquete, los investigadores españoles recién lograron descifrar todas las informaciones en diciembre pasado y entonces informaron al Buró Federal de Investigaciones (FBI) y a la Central de Inteligencia estadounidense (CIA).
Los investigadores desconocen quién realizó la documentación hallada en el apartamento y a quién pertenecía, pero la transmitieron a las autoridades estadounidenses, teniendo en cuenta que España sirvió de base de preparación para los atentados del 11 de septiembre de 2001 en EE.UU.
En Nueva York, el alcalde Michael Bloomberg dijo que el FBI había informado al departamento de policía sobre la existencia de datos en la computadora y la ciudad respondió reforzando la seguridad en los centros de tránsito. Entrevistado por la radio WBLS, Bloomberg dijo: “Hemos tomado las medidas apropiadas para reforzar la seguridad en todas los grandes centros de transporte, estaciones de trenes, aeropuertos y estaciones de ómnibus, lugares donde los terroristas podrían atacar si quisieran”. Por su parte, el comisario de la policía de Nueva York, Raymond Kelly, restó importancia al significado del material, diciendo que eran “dibujos básicos” y “no un plan operativo”. “No es algo que indique una amenaza inmediata contra una instalación”, dijo Kelly en conferencia de prensa.
Mouhannad Almallah, detenido el 24 de marzo en España, fue puesto en libertad provisional por el juez español Juan del Olmo, que instruye la causa. Almallah es hermano de un militante islamista señalado como el número dos de una célula de Al Qaida en España llamado Moutaz Almallah. Moutaz, quien huyó de España en enero de 2002 tras la operación que desarticuló la célula española de Al Qaida, era el propietario del departamento donde vivía Mouhannad, así como también de otro piso de Madrid en el que se alojaban dos detenidos por el 11-M, que se encuentran en prisión, Basel Ghalyoun y Fouad El Morabit. Basel Ghalyoun está acusado de ser uno de los autores materiales del 11-M, mientras a Fouad El Morabit se lo acusa de integrar el grupo terrorista que cometió los atentados.
El Ministerio del Interior de España informó ayer que un año después de los atentados del 11-M, el gobierno indemnizó a las víctimas con algo más de 44 millones de euros.