EL MUNDO
Israel, desacuerdo en el Likud y leve satisfacción por los arrestos
El Comité Central del partido de Sharon votó por una consulta sobre Gaza. La AP detuvo a milicianos.
El primer ministro israelí, Ariel Sharon, reafirmó su determinación de aplicar su plan de retirada de la Franja de Gaza a pesar de una resolución del comité central de su partido, el Likud, a favor de realizar un referéndum previo. Por otra parte, Israel ha reaccionado con cierta satisfacción pero mucho escepticismo ante un hecho sin precedentes desde 1996: la detención por parte de las fuerzas de seguridad de la Autoridad Palestina (AP) de varios activistas armados del grupo integrista Jihad Islámica en Cisjordania y la Franja de Gaza. Un coche bomba explotó en Cisjordania sin provocar heridos.
El Comité Central del Likud, el partido de Sharon, reunido en Tel Aviv, votó a favor de este referéndum a pesar de la oposición del primer ministro a este procedimiento que entorpece el plan de evacuación en julio de las colonias de Gaza y cuatro del norte de Cisjordania. Sharon aseguró al Likud que la retirada de la Franja de Gaza no anunciaba el fin de la colonización en Cisjordania, ni en la región de Jerusalén este. “Gracias a la colonización guardaremos para la eternidad nuestras posiciones más importantes, esenciales para nuestra existencia: en Jerusalén, nuestra capital unificada para siempre, en los bloques de implantaciones de los lugares más sagrados de nuestra historia y en las zonas de seguridad capital para nuestra defensa”, declaró Sharon.
Por otro lado, ante las detenciones de la AP de varios miembros de las facciones armadas, sospechosos de haber estado involucrados en el atentado de Tel Aviv, un oficial del Estado Mayor israelí reconoció que “aunque hemos de felicitar a Abu Mazen por estas detenciones, nuestra impresión es que es una medida simbólica, que no corresponde a lo que nosotros definimos como una auténtica guerra contra los grupos armados”.
Además pidió a Abu Mazen que cambie a los jefes de seguridad en Cisjordania tal y como ha hecho en la Franja de Gaza. Ante las quejas de las cúpulas militar y política de Israel, ayer el ministro palestino de Asuntos Civiles, el coronel Mohamed Dahlan, denunció que Israel no facilita la labor de los organismos de seguridad de la AP y puso un ejemplo: “No nos permiten enviar agentes a la ciudad de Tulkarem para ocuparnos de la célula de Jihad”, sospechosa del ataque de Tel Aviv. Dahlan acusó al gobierno israelí de “no respetar su compromiso de levantar los puestos de control en los accesos a las ciudades palestinas”. Mientras, un coche bomba explotó en Naplus sin provocar heridos.