EL MUNDO › EN PLENA INVESTIGACIóN SOBRE ESCALAS SECRETAS DE LA CIA EN EUROPA, ESPAñA NIEGA QUE FUERAN ILEGALES. LOS CONTROLES ERAN FLOJOS DESDE 2002.
Una pista sobre los vuelos de la CIA, Aznar flexibilizó el control aéreo
“El gobierno español tiene la convicción de que todas aquellas escalas realizadas en el marco del convenio de cooperación para la defensa entre España y Estados Unidos, así como las escalas de aviones civiles, se han realizado de acuerdo a la ley”, afirmó ayer Miguel Angel Moratinos, ministro español de Asuntos Exteriores, durante una comparecencia ante el Parlamento. Las declaraciones se producen a raíz del presunto involucramiento de España en vuelos secretos de la CIA y del conocimiento de la flexibilización en 2002 de los controles existentes sobre los aviones de Estados Unidos que sobrevuelan o hacen escala en España. Además, Moratinos volvió a defender la venta de aviones y buques a Venezuela y dijo que el presidente Hugo Chávez “no desestabiliza la región”.
El llamado Protocolo de Enmienda al Convenio de Cooperación para la Defensa entre España y Estados Unidos, de abril de 2002, instauró las autorizaciones genéricas de carácter trimestral, en lugar de las individuales caso a caso, y eliminó la necesidad de notificar “el tipo y la finalidad de la misión” de los aviones en tránsito por España. De esta manera se relajaron notablemente los controles sobre los tránsitos y escalas de aviones estadounidenses en plena guerra de Afganistán, pero se mantuvo la obligatoriedad de presentar el correspondiente plan de vuelo, por lo que las autoridades españolas deben saber si se ha producido algún viaje directo desde España a la base de Guantánamo (Cuba), donde 500 supuestos miembros de Al Qaida permanecen en un limbo legal. Según el convenio, modificado durante la presidencia de José María Aznar, el Ministerio de Defensa español no pregunta al Pentágono qué hay dentro de los aviones que hacen escala en las bases españolas ni inspecciona el pasaje, pero Estados Unidos violaría el acuerdo si trasladara presos en condiciones ilegales, pues éste excluye el tránsito de aviones con “pasajeros o carga que pudieran ser controvertidos para España”.
En su presentación ante el Parlamento, Moratinos afirmó que todas las escalas se hicieron “de acuerdo a la ley”, pero prometió “reforzar los controles de aeronaves civiles” y aplicar “mecanismos de verificación más exhaustivos”. Además, el ministro sostuvo que “ningún método ilícito ha contado o contará nunca con la complicidad del gobierno”. Por su parte, el embajador de Estados Unidos en España, Eduardo Aguirre, afirmó que las leyes del país “en ningún momento han sido violadas”. Pero eso no fue todo. Moratinos volvió a defender ayer la venta de aviones y buques patrulleros a Venezuela y aseguró que dichas negociaciones no van a perjudicar las relaciones con Washington. En respuesta a las acusaciones de Aguirre de que el presidente venezolano es un peligro para Latinoamérica, el ministro afirmó que el mandatario “no es un elemento desestabilizador para la región”, sino que “el problema son las condiciones de vida que llevan a regímenes populistas”.