EL MUNDO › LA SALIDA DEL GOBIERNO DE JORDANIA
Golpe palaciego
Dos semanas después de los atentados suicidas que dejaron 57 muertos en Amman, la capital de Jordania, el primer ministro de ese país, Adnan Badran, presentó ayer su renuncia y la de todo el gobierno al monarca del país Abdalá II, en un marco de importantes cambios institucionales. El rey aceptó la dimisión y ya eligió como sustituto para el cargo al ex general Maruf Bajit, jefe de la Agencia de Seguridad Nacional, creada tras los ataques del pasado 9 de noviembre. En la solicitud de formación de gobierno, el monarca le pide a Bajit que continúe con la lucha contra el terrorismo desde una estrategia “global no limitada a las medidas de seguridad”. Jordania ha apoyado la invasión de Irak y es considerada por Al Qaida como “el patio trasero” de Estados Unidos en la región. “Las bombas terroristas que golpearon una parte de las infraestructuras de nuestra amada capital sólo aumentarán nuestra determinación de continuar con la democratización y las reformas, que consideramos irreversibles”, explicó el monarca en una misiva.
La renuncia del gobierno es un nuevo eslabón de una cadena de cambios auspiciados por el rey desde los atentados. En los pasados días, Abdalá II aceptó la dimisión de ocho de sus colaboradores más estrechos, incluido el jefe de la Casa Real, Faisal Fayez, además de la disolución del Senado y el nombramiento de uno nuevo la semana pasada. El rey efectuó también cambios en el palacio, nombrando a Bajit director de Seguridad Nacional, un servicio ligado al palacio real. Además, el fin del Ejecutivo de Badran tiene lugar pocas horas después de que el monarca jordano recibiera la denominada Agenda Nacional de Seguridad, un documento de más de 2500 páginas preparado por 450 políticos, intelectuales, economistas y abogados del país. El documento diseña las líneas maestras que deberán respetar los gobiernos que rijan el país durante la próxima década, explicó el viceprimer ministro, Marwan Muasher, presidente del comité redactor.
El nuevo jefe de gobierno, Maruf Bajit, de 58 años, es un general retirado con gran prestigio académico (doctorado en Ciencias Políticas y Estudios Estratégicos por la Universidad de Londres) y militar, por su gran capacidad estratégica. El general está considerado un hombre de confianza del soberano, quien ya lo había elegido como embajador en Israel en febrero pasado, cuando el reino jordano decidió desbloquear sus relaciones con dicho país, congeladas desde el inicio en 2000 de la segunda Intifada palestina. La misión del nuevo gobierno será garantizar la aplicación del programa de reformas, especialmente una nueva legislación electoral que sustituya el actual sistema. Según el diario The Jordan Times, hay rumores de que la Cámara baja del Parlamento sería disuelta para poder convocar a elecciones anticipadas posiblemente entre mayo y junio de 2006, bajo una nueva ley. Las fuerzas políticas jordanas están profundamente divididas acerca de la disolución de la Cámara de Representantes, ya que algunos lo consideran como un retroceso en el proceso de democratización.