Sociólogos de celebridades y politólogos franceses se esfuerzan en explicar por qué la gente tiene tanta dificultad en creer que Strauss-Kahn podría ser culpable. Es que Francia se encuentra shockeada, y en un estado de negación. Más de la mitad de la gente encuestada hace dos días, el 57 por ciento, está convencida de que Dominique Strauss-Kahn fue víctima de una trampa. “Hay una gran brecha entre el DSK que era presidenciable y el hombre esposado que enfrenta cargos sexuales”, le dijo a The Independent la politóloga Stephane Rozes. “La gente sostiene dos posturas: o está loco o fue víctima de una manipulación.”

Incluso a las clases políticas les es difícil abordar el tema. Desde la izquierda, se les echa la culpa a los norteamericanos, especialmente por permitir que Strauss-Kahn sea fotografiado con esposas (algo prohibido en Francia). Sin embargo, poco a poco comienza a escucharse el murmullo político tan común por estos casos. El presidente Nicolas Sarkozy le ha dicho a su equipo que no hagan declaraciones. Se dice que en privado se muestra rozagante, convencido de que este escándalo no sólo destruyó a Dominique Strauss-Kahn, sino la moral y el apoyo de toda la centroizquierda francesa. Otro sondeo de opinión sugirió que Sarkozy podría estar equivocado con respecto a eso. La mitad de los encuestados afirman que la izquierda ganaría las elecciones presidenciales del año próximo. Con la nación aún en estupor, se hace difícil predecir qué efectos tendrá el impacto a largo plazo del affaire del hombre fuerte del FMI. Incluso los más avezados e informados individuos en Francia sostienen sus teorías conspirativas: que las fuerzas oscuras de Sarkozy están obviamente persiguiendo la desgracia del rival más peligroso para los comicios generales, o que Washington quería eliminar a Strauss-Kahn de su puesto en el organismo multilateral de crédito.

Si la gente comienza a aceptar que las teorías conspirativas son incorrectas, podría darles la espalda no sólo a Strauss-Kahn o la izquierda, sino a toda la clase política francesa en su conjunto.