Leonardo Boff, uno de los referentes más importantes de la Teología de la Liberación en Brasil y el mundo, atacó ayer la doctrina conservadora de Benedicto XVI, horas antes de su llegada a San Pablo. “La principal responsable de la fuga de fieles es la propia Iglesia, que es muy centralizadora y jerarquizadora, y que margina a las mujeres y subestima a los laicos”, cuestionó el ex sacerdote franciscano. “Como no estimula las innovaciones en las formas de manifestar la fe, la Iglesia se queda cada vez más fosilizada”, explicó Boff, quien desde hace tiempo aboga por la inclusión de elementos culturales autóctonos a la rígida doctrina que promueve el Vaticano en todo el mundo. “Tiene que asumir los elementos de nuestra cultura negra, indígena y popular”, agregó. Boff cuestionó a la institución, pero también a la dirección del nuevo Papa. “Hasta ahora no ha dado señales de un proyecto más abierto de Iglesia ni de buscar caminos diferentes a aquellos ya recorridos por Juan Pablo II y que él ayudó a formular. El es el nítido Papa de transición”, aseguró el teólogo.