La intención oficial de ponerle fin al conflicto agrario de manera unilateral se está viendo frustrada por un escenario cada vez más complicado que ayer incluyó cientos de cortes en las principales rutas del país. Las entidades rurales levantaron formalmente la medida de fuerza el domingo por la noche, pero los productores siguen retaceando las ventas de granos y algunos mantienen los cortes. En respuesta, los transportistas también bloquean rutas, argumentando que su fuente de trabajo está en riesgo. Nadie pareciera hacerse cargo de lo que está ocurriendo y el clima se enrarece cada vez más. De hecho, ayer trascendió que durante la madrugada seis camiones que transportaban combustible fueron atacados a balazos en Entre Ríos, lo que finalmente no se comprobó. En este contexto, comenzaron a generalizarse los faltantes de gasoil y nafta y el temor al desabastecimiento de alimentos aumenta. El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, se limitó ayer a pedirles a quienes cortan los accesos a las ciudades que “recuperen la sensatez”.

Los principales protagonistas de los bloqueos ahora son los transportistas de granos de Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos, Córdoba y La Pampa. Los empresarios afirman que sólo pondrán fin a su lockout cuando las entidades rurales terminen con el suyo, pero los dirigentes del agro remarcan que levantaron la medida de fuerza el domingo y que si hay productores que no comercializan es una decisión individual que responde a la falta de incentivos que les otorga el mercado. “Comprendemos el problema de los camioneros, pero no podemos hacer nada por ellos: es el Estado el que tiene que entender que en estas condiciones no se puede comercializar”, afirmó ayer Hugo Luis Biolcati, vicepresidente de la Sociedad Rural. En privado incluso algunos productores dejaron trascender que el Gobierno está detrás de la jugada que vienen llevando adelante los camioneros para forzarlos a terminar con la protesta, pero nadie se ánima a decirlo públicamente porque no tienen ninguna prueba que avale esa rebuscada hipótesis.

Mientras tanto, los dirigentes del sector siguen reclamando que se los convoque a dialogar para encauzar la situación, pero en el Gobierno remarcan que sólo se sentarán a conversar cuando la circulación en las rutas esté regularizada. “Esperemos que todo se normalice. Uno ve con preocupación todavía cortes de ruta y balaceras en el medio, hechos que a todos nos preocupan y que esperamos que pronto cesen”, declaró Alberto Fernández cuando lo consultaron sobre la posibilidad de retomar la negociación.

Nadie parece dispuesto a dar el primer paso y mientras tanto los problemas aumentan. Ayer en la provincia de Buenos Aires se registraron cortes de rutas en Pergamino, Olavarría, Saladillo, Bragado, Chivilcoy, Las Flores, Ramallo, Lincoln, Junín y Chacabuco, entre otras localidades. Fuentes de Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y la Pampa (Carbap) señalaron a PáginaI12 que los productores no están participando de los bloqueos y que se mantienen a la vera del camino.

En la provincia de Santa Fe la situación fue más difícil aún. Durante la tarde de ayer todos los accesos a Rosario permanecieron cerrados. Los camiones no pudieron pasar por el puente Rosario-Victoria, las rutas 34, 33, 11 y 9. También se bloquearon las refinerías ubicadas en la ciudad de San Lorenzo, el acceso al Puerto de San Martín y otros puntos clave de la provincia. En el sur de Córdoba la situación era similar. “Desde hace unos tres meses nos encontramos paralizados y esta medida de fuerza no se levantará hasta que los productores rurales terminen con el lockout de comercialización”, aseguró Daniel Vilanova, secretario general de la Federación de Transportistas Rurales Argentinos. El dirigente se manifestó indignado con los productores: “Se ha colmado la paciencia, levantan el paro y Alfredo De Angeli convoca a no vender y a frenar al transporte de cereal. Este es el paro de la impotencia”, remarcó.

En Entre Ríos, por su parte, el comisario Juan Rull, a cargo de la dirección vial de la provincia, informó ayer que se estaba impidiendo el paso de camiones con granos en el túnel Paraná-Santa Fe, Villaguay, Gualeguay, Chajarí y Rosario del Tala. Allí los productores rurales siguen teniendo participación activa en los bloqueos, pues algunos “autoconvocados” desconocieron la decisión de la Mesa de Enlace.

Otra de las provincias donde se registran numerosos bloqueos es en el Chaco. Ayer hubo cortes en Roque Sáenz Peña, Avia Teray, Las Breñas, Pinedo, Charata, Gancedo y Gato Colorado, todas localidades ubicadas a la vera de la ruta 95. “Los cortes los estamos llevando adelante productores autoconvocados y transportistas que apoyan nuestro reclamo”, señaló a PáginaI12 Sonia Ibáñez, una de las protagonistas de la protesta. Allí el combustible ya es muy difícil de conseguir, pero los alimentos todavía no escasean porque muchos camiones transitan por caminos vecinales de tierra.

En Tucumán también hubo cortes protagonizados por transportistas y productores de Federación Agraria que desconocieron el mandato de la conducción nacional. Miguel Pérez, titular de la Federación en la provincia, reconoció que se unieron con los camioneros tras un solo objetivo porque “hay mucha bronca y no es fácil contener a las bases”.