El jefe de Gobierno, Mauricio Macri, le inició una querella por daños y perjuicios a las organizaciones K y a las ruralistas que instalaron carpas frente al Congreso durante el lockout agropecuario. Lo curioso es que, con esta decisión, Macri querellará a sus propios aliados, camuflados como “Autoconvocados de Capital Federal por la Protesta Agraria”. Como informó PáginaI12, quien gestionó la “carpa verde” es Ignacio Maquieyra, un joven asesor del titular de Recrear, Esteban Bullrich, y quien la alquiló es Nicolás Mattiauda, vicepresidente de Recrear-PRO de Entre Ríos. Ahora ambos deberán defenderse en un juicio iniciado por su líder político.

El gobierno porteño informó que les inició una demanda a todos los que instalaron carpas en la Plaza del Congreso para que paguen por los gastos extra que le generaron a la comuna, que calculan en 58.053 pesos. Según el detalle que difundió la gestión PRO, la limpieza extra de las fuentes les costó 6300 pesos; la reposición de florales, unos 15 mil pesos; la limpieza adicional, otros 12.600; el servicio de higiene urbana, 8639,29, y la provisión, colocación y recolocación de solados, 11.314,56 pesos.

El líder de PRO piensa cobrarles la extensa factura a las organizaciones K Movimiento 26 de julio, Militancia Social, a la Federación de Tierra y Vivienda, de Luis D’Elía; al Frente Transversal Nacional y Popular, de Edgardo Depetri; a Compromiso K, al Movimiento de Integración Justicialista y hasta a una Asociación Indígena de la República Argentina. Pero además demandó a Carbap y a los “Autoconvocados por la Protesta Agraria”. Como detalló este diario, el que gestionó la carpa dentro de estos “autoconvocados” fue Maquieyra, quien también formó parte de otro grupo de “autoconvocados”: los que se manifestaron contra la eliminación de las AFJP. Maquieyra hizo las gestiones para instalar la “carpa verde”, que luego alquiló el dirigente de Recrear Mattiauda, mano derecha de Alfredo De Angeli, por tan sólo 1500 pesos por una semana. “Un superprecio”, consideró Maquieyra en ese momento. No tenía todavía la factura de Macri.