Cuando Néstor Kirchner apareció en el pequeño salón del Club Vasco de La Plata, dispuesto a dar una conferencia de prensa, sus acompañantes se acomodaron en sus asientos. Parecía inevitable que la rueda de prensa a agenda abierta, organizada por el subsecretario de Comunicación, Alfredo Scoccimarro, derivaría hacia el debate por la Ley de Servicios Audiovisuales que ayer mismo comenzó a tratarse en el Congreso. Las previsiones se confirmaron rápidamente. Ante la primera pregunta sobre el tema, Kirchner defendió el proyecto para terminar con la ley de Radiodifusión impuesta por la dictadura. “Se trata de una ley muy democrática y muy bien trabajada. No es la ley de un gobierno sino del Estado argentino”, aseguró. Enseguida puntualizó que se habían incluido 138 modificaciones al texto inicial a partir de los foros de discusión realizados en todo el país, negó que se vayan a revisar las licencias cada dos años y recordó que el proyecto había sido elogiado por el Relator de Libertad de Expresión de la ONU, el guatemalteco Frank La Rue. “Algunos están muy nerviosos. Tienen que tranquilizarse y ser más democráticos.”

La presentación de Kirchner en el Club Vasco de La Plata había sido pensada como un gesto de apoyo explícito al lanzamiento de una nueva corriente kirchnerista del peronismo platense. La iniciativa había salido del senador provincial Guido Carlotto y el ministro de Justicia, Julio Alak, intendente de la capital bonaerense por 16 años. La idea luego sumó el respaldo del diputado Remo Carlotto, hermano de Guido, y del secretario de Coordinación del ministerio de Desarrollo Social, Carlos Castagneto. En su visita a La Plata, Kirchner también estuvo acompañado por el vice, Alberto Balestrini; los diputados Carlos Kunkel, Ariel Pasini y Claudia Bernazza; el subsecretario de Comercialización de la Economía Social, Emilio Pérsico; el ministro de Educación bonaerense, Mario Oporto; el titular de la Side, Héctor Icazuriaga; el ministro del Interior, Florencio Randazzo, y el secretario de Medio Ambiente, Homero Bibiloni. El gobernador Daniel Scioli llegó tarde y se sumó a la conferencia de prensa mientras se estaba desarrollando: se abrazó con Kirchner delante de las cámaras.

El ex presidente no se privó de contestar cada una de las preguntas. Negó que hubiera impulsado el desplazamiento del ex ministro de Asuntos Agrarios bonaerense, Emilio Monzó. Entonces agregó que como a él nunca le había gustado que lo presionaran para ubicar a determinado funcionario, él nunca haría lo mismo con Scioli. “Menos lo haría con Daniel, a quien le tengo un profundo afecto”, subrayó. Luego dijo que el Gobierno cumplirá con todas las obras públicas prometidas a los intendentes “a pesar de la crisis internacional”. También rechazó las versiones que interpretaron su visita a La Plata como una señal de descontento para con el intendente Pablo Bruera, a quien algunos dirigentes K acusan de haber alentado el corte de boleta en perjuicio del Frente para la Victoria. Incluso durante la conferencia de prensa se escuchó a una voz anónima gritar: “¡Bruera traidor, mandaste cortar a Kirchner!” “He venido a discutir políticas globales y no a descalificar a nadie”, aclaró el ex mandatario. “La Presidenta apoya absolutamente a todos los intendentes”, subrayó.

El momento más tenso se produjo cuando un periodista de Clarín le preguntó por el aumento del patrimonio que apareció en su última declaración jurada de bienes. Luego completó con otra pregunta: si pensaba donar su pensión como ex presidente. “Como cualquier ciudadano me someto a la investigación de la justicia, no me someto al poder monopólico de Clarín. Jamás le he preguntado a la señora (Ernestina) Herrera de Noble, a (Héctor) Magnetto o a (José) Aranda qué hacen con sus recursos y su dinero. No le tengo miedo a nadie. Voy a apoyar todo lo que sea la transformación democrática. Clarín y su monopolio me puede insultar, pero lo hace para mantener una posición monopólica y seguir manejando la información y los privilegios”, contestó Kirchner. “No sé si te mandó Clarín, Rendo o Magnetto. El monopolio está acostumbrado a extorsionar, a ensuciar a la gente. Es un problema mío”, agregó en referencia a la consulta sobre su pensión como ex mandatario.

Página/12 le preguntó por la amenaza de los supuestos autoconvocados cercanos a la Mesa de Enlace de cortar la autopista a Rosario para entorpecer la llegada de asistentes al partido de la Selección. “Espero que el campo no corte la ruta a Rosario el día del partido entre Argentina y Brasil”, pidió. Página/12 también le preguntó por la flamante resolución del Comfer que rechaza la fusión entre Cablevisión y Multicanal (ver página 4). El 7 de diciembre de 2007, la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia había emitido un dictamen a favor de esa fusión entre las dos distribuidoras de TV por cable que controlan el mercado en la región metropolitana. Ambas pertenecen al Grupo Clarín. “Eso demuestra la cristalinidad de las instituciones. La Comisión emitió un dictamen y ahora el Comfer otro en sentido contrario. Pero no conozco los argumentos de la resolución del Comfer”, contestó.

Tras la conferencia de prensa, Kirchner dio un discurso ante unas quinientas personas que llenaron el salón de fiestas del Club Vasco. Allí, en confianza y sin eludir la autocrítica, el santacruceño retomó el tema de la fusión entre las principales distribuidoras de TV por cable. “Una buena pregunta que me hicieron me lleva a pensar en los errores que cometimos. Cometimos muchísimos errores por escuchar voces que nos decían `éste no es el momento’. Y después eso lo sufría el pueblo argentino. Los cambios demuestran la cristalinidad de las instituciones”, insistió.