El Gobierno ya no quiere más demoras en el camino parlamentario que finalmente eligió para eyectar a Martín Pérez Redrado de la presidencia del Banco Central y aceleró todos los pasos. Hoy por la tarde se reunirán por separado las comisiones de Presupuesto y de Finanzas de la Cámara de Diputados para elegir a sus autoridades. Los presidentes de ambas comisiones –los propuestos son el kirchnerista Gustavo Marconato y el lilito Alfonso Prat Gay– también serán parte, junto a Julio Cobos, de la Comisión Bicameral que debe emitir un “consejo” a favor o en contra del desplazamiento de Redrado, aunque éste no es vinculante y, por lo tanto, tampoco determinante a la hora de decidir la suerte del díscolo presidente del Central. Pero el Ejecutivo necesita de ese pronunciamiento legislativo, previsto en la Carta Orgánica del BCRA, para tomar la decisión final. Con los presidentes de las comisiones designados, el Gobierno le pediría a Cobos que convoque a la Bicameral mañana mismo.

La cita para los 49 diputados que conforman la Comisión de Presupuesto y Hacienda y de los 31 integrantes de la de Finanzas es hoy a primera hora de la tarde en el Salón Delia Parodi del Congreso. La convocatoria fue comunicada desde la presidencia del cuerpo en forma telefónica, en algunos casos, y a través de telegramas a otros. Incluso, Eduardo Fellner se encargó de anticiparles la invitación a varios presidentes de los bloques opositores, que ayer por la tarde dieron el visto bueno a la convocatoria tras un encuentro donde analizaron la situación (ver aparte).

Entre los legisladores más veteranos, nadie recuerda que la integración y la elección de las autoridades de una comisión permanente de la Cámara baja haya suscitado tantas expectativas. Los encuentros de hoy (a las 15 Presupuesto y a las 16 Finanzas) no irán más allá de eso, aunque sus presidentes tendrán una tarea adicional: conformar la comisión bicameral que analizará el pedido del Ejecutivo de desplazar a Redrado.

El conglomerado opositor tiene mayoría de miembros en ambas comisiones, aunque el acuerdo sellado entre oficialismo y oposición le permitió al bloque K conservar la presidencia en Presupuesto, para el que designó a Marconato. La comisión “espejo”, Finanzas, quedará en manos de la oposición y el hombre elegido fue otro ex banquero del Central, Prat Gay.

En el Gobierno ya habría decidido que, tras la designación en las comisiones de Diputados, solicitarán a Cobos –que según la Carta Orgánica del Central debe presidir la comisión como presidente del Senado– que convoque a la Bicameral. La propia Presidenta dijo, en la rueda de prensa donde realizó el anuncio de integrar la Bicameral, que “con tres de los cinco miembros de la comisión designados, ésta ya tiene quórum para sesionar”. Las diferencias entre oficialistas y opositores en la Cámara alta postergó hasta el 23 de febrero la integración de sus comisiones, por eso los senadores no podrán ser parte de la bicameral donde los presidentes de Presupuesto y Economía también tienen asientos asignados.

Cerca de Cobos afirmaban desconocer ayer algún pedido del Ejecutivo sobre la convovatoria a la Bicameral. El vicepresidente se reunió con un grupo de colaboradores para evaluar el nuevo escenario legislativo. Algunos de ellos le habría sugerido a Cobos que “es hora de soltarle la mano a Redrado”, cuestionado también desde sectores de la oposición y ya sin poder dentro del directorio de la entidad bancaria. Aunque admitieron que la decisión final sobre el sentido de su voto en la Bicameral está exclusivamente en manos del vicepresidente.

Desde la Casa Rosada también barajaban alternativas para la estrategia parlamentaria. El Gobierno debe decidir si cambiará las acusaciones contra Redrado o utilizará los mismos argumentos que dieron origen al decreto de necesidad y urgencia (DNU) con que intentó desplazar al presidente del Central. El DNU alude al incumplimiento de los deberes de funcionario público porque “no se ejecutó la norma (la puesta en marcha del Fondo del Bicentenario) por la actitud remisa del presidente del Central, quien públicamente ha manifestado que no la ejecutaría y de hecho parece no tener reparo en omitir, rehusar o retardar el cumplimiento de la norma cuyo cumplimiento le concierne”.

Prat Gay salió ayer al cruce de los argumentos oficiales. También el ex presidente del Central dijo que la Bicameral tiene que probar el “incumplimiento de los deberes” de funcionario público de Redrado y por lo tanto deberá “tomarse el trabajo de ver si existe o no ese incumplimiento”. Una forma de anunciar que se tomará todo el tiempo necesario para emitir un pronunciamiento que no es vinculante. “Lo mínimo que hay que hacer es convocar a Redrado y otros testigos, quizá del Banco Central, del Ministerio de Economía y del Congreso de la Nación para poder tener un juicio razonable”, aseveró Prat Gay.

El diputado de la Coalición Cívica considera que en esa tarea contará con el respaldo de Cobos, que hizo propio el pedido personal de Redrado para que “se respeten todas las garantías para ejercer su defensa”. Aunque otros legisladores de la CC opinaban que había que “desconocer el DNU presidencial y sus argumentos”, porque consideran que Redrado cumplió su rol de conservar las reservas del BCRA. Pero Prat Gay se reunió a solas con Elisa Carrió para delinear la estrategia y apagó su celular.

En el mismo sentido se pronunció el presidente de la UCR, Ernesto Sanz. El senador mendocino sostuvo que él no encontraba en Redrado “mala conducta” ni tampoco “mal cumplimiento” de sus deberes de funcionario público. Pero manifestó la “importancia” de que el tema de Redrado “siga en el canal del Congreso”.