El flamante titular de Defensa, Arturo Puricelli, admitió ayer que llega a un ministerio “ordenado” y explicó que su objetivo es “profundizar” los logros alcanzados durante la gestión de Nilda Garré para contar con Fuerzas Armadas “adiestradas, capacitadas y con un gran sentido de respeto por los derechos humanos”. También destacó la necesidad de dar continuidad al desafío de alcanzar “una amplitud de pensamiento” por parte de los oficiales y suboficiales en actividad, “para que los uniformes distingan a nuestros militares, pero no los separen de la gente sino, por el contrario, que sean aceptados”. El ex gobernador santacruceño calificó de “temerarias” las declaraciones del ex ministro Horacio Jaunarena, quien sugirió que “el Ejército sólo está preparado para dos horas de combate”, y le recordó que durante su gestión al frente de Fabricaciones Militares se triplicó la producción de municiones para las Fuerzas Armadas.

Puricelli juró el miércoles como ministro de Defensa en reemplazo de Garré, que asumió al frente del Ministerio de Seguridad. Su lugar al frente de Fabricaciones Militares será ocupado por el vicealmirante Enrique Olmedo, que pasó a retiro como jefe de personal de la Armada y tercer hombre del escalafón naval debajo de Jorge Godoy y Benito Rótolo. El funcionario, oriundo de Santa Cruz como la Presidenta, supo estar enfrentado políticamente con el fallecido Néstor Kirchner.

“Hay que tener capacidades como para saber que estamos en condiciones de defender nuestros recursos naturales, población y continente, pero siempre frente a la decisión política de nuestro gobierno que es profundizar la tarea de la diplomacia”, explicó el ministro ayer en una entrevista radial. “Esperamos poder trabajar sobre la base de lo que se ha construido en reformas que han sido sustanciales y que indudablemente van a poner a nuestras Fuerzas Armadas en un lugar muy destacado y moderno”, agregó el funcionario en referencia a las políticas impulsadas por Garré, quien condujo esa cartera durante el último lustro.

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner “tiene muy en claro lo que quiere para las Fuerzas Armadas”, admitió Puricelli, y prometió trabajar para que Ejército, Armada y Fuerza Aérea “estén en las mejores condiciones y equipadas dentro de las mejores posibilidades que nos permitan los recursos económicos”. “Se está trabajando sobre la base de lo que fue una convocatoria del ex presidente Néstor Kirchner al Consejo Nacional de la Defensa, allá por 2007”, precisó.

Puricelli rechazó por “temerarias” las declaraciones de Jaunarena, ex ministro de Defensa de Raúl Alfonsín y luego de Carlos Menem. “El Ejército sólo está preparado para dos horas de combate”, había dicho el ideólogo de la ley de obediencia debida. “Muy respetable la opinión del doctor Jaunarena pero, por cierto, no la comparto”, aclaró el ministro. “Lo que sí le puedo decir al señor Jaunarena es que yo el año pasado, como director de Fabricaciones Militares, produje once millones y medio de municiones, y ese nivel de producción había multiplicado en tres la capacidad de producción” respecto de los años anteriores, afirmó.

“La política de defensa no puede ser la impronta de un ministro sino la de una decisión política del Gobierno que es muy clara y no- sotros compartimos”, subrayó. Precisó que a fin del primer trimestre de 2011 anunciará un plan “que defina qué fuerzas necesitamos” y cuáles son las demandas en el corto, mediano y largo plazo, que cuantificó en tres, veinte y treinta años. Sobre eventuales cambios, Puricelli dijo que “es un ministerio que está ordenado”, que “ha venido trabajando” en las estructuras militares, y que espera “profundizar esos logros y conseguir los frutos de las importantes reformas” realizadas.

Ayer, a través del decreto 2013, la Presidenta designó como secretario de Estrategia y Asuntos Militares a Alfredo Forti, que se de-sempeñaba como secretario de Asuntos Internacionales. Forti reemplaza a Gustavo Sibilla, que ahora será secretario de Planeamiento del flamante Ministerio de Seguridad. La Presidenta también le aceptó la renuncia a Patricia Báez Rocha, que seguirá ocupando el lugar de subsecretaria de Coordinación pero no en Defensa sino en Seguridad. De la asunción de Forti participaron el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, brigadier general Jorge Chevalier, y de los Estados Mayores Generales del Ejército, teniente general Luis Pozzi, de la Armada, almirante Jorge Godoy, y de la Fuerza Aérea, brigadier general Normando Costantino.