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La negociación salarial que el gobierno nacional mantiene con los cinco principales gremios docentes pasó ayer a un cuarto intermedio hasta mañana, debido a las diferencias que persisten en el sueldo inicial para los maestros de todo el país. En el encuentro se discutieron, además, “diversas cuestiones que interesan al sector docente”, aseguró su titular, Alberto Sileoni. En tanto, el Ministerio de Educación bonaerense y el Frente Gremial Docente acordaron una nueva reunión para el viernes, luego de que los gremios formalizaran su pedido de un piso de 2500 pesos.

La reunión entre los funcionarios del Ministerio de Educación y los sindicatos pasó a cuarto intermedio ante la imposibilidad de un acercamiento en sus propuestas. Las conversaciones se retomarán mañana, pero la impasse abierta afectó los contactos que otras jurisdicciones, como la provincia de Buenos Aires, habían iniciado.

El ministro Sileoni se mostró optimista en arribar a un acuerdo y se mostró convencido al respecto: “Vamos a arreglar, como en los últimos años”. A la reunión, que empezó pasadas las 14, asistieron el ministro de Economía, Amado Boudou, y representantes de la Confederación Trabajadores de la Educación (Ctera), del Sindicato Argentino de Docentes Privados, Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica, Unión Docentes Argentinos (UDA) y la Confederación de Educadores Argentinos.

La titular de Ctera, Stella Maldonado, aseguró que se definió un cuarto intermedio tras avanzar “en aspectos que tienen que ver con la inclusión de docentes en créditos para planes de vivienda” y con la problemática de la seguridad y la higiene en los establecimientos. “El ministro Boudou realizó un informe sobre la situación fiscal de las provincias”, explicó la dirigente, quien estimó que el jueves “el Gobierno nos hará una propuesta salarial”. Según trascendió, el reclamo docente de equiparación de las asignaciones familiares fue parte del pedido. Por su parte, Sergio Romero, titular de UDA, recordó que los sindicatos insistieron en su pedido inicial de 2500 pesos para la primera escala. “Hay que ser pacientes y escuchar, pero sería preocupante si esta semana no hay una oferta salarial”, advirtió. En la primera reunión, el vienes pasado, el ministerio consideró elevado el pedido de los gremialistas y adelantó que ofrecerá un incremento escalonado o por etapas, en la próxima reunión.

En tanto, en la provincia de Buenos Aires, el titular del Sindicato Unico de Trabajadores de la Educación (Suteba), Roberto Baradel, coincidió en pedir “un piso de 2500 y que docentes y trabajadores estatales puedan recibir asignaciones familiares”. La titular de la Federación de Educadores Bonaerense, Mirta Petrocini, indicó que “la expectativa para esta discusión depende de lo que se defina en la paritaria nacional”, para que luego las escalas puedan ser definidas en cada jurisdicción.