Después del resultado de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias y una bronquitis aguda, el candidato presidencial Ricardo Alfonsín reaparecerá hoy en la escena política, cuando sea el orador de cierre de una reunión en el Comité Nacional donde se convocarán todos los presidentes de los comités provinciales del país, además de los titulares de los bloques parlamentarios. Pero por fuera de la muestra de unidad, en privado el clima de la UCR sigue siendo tenso. En una cumbre del bloque de Diputados de ayer, el alfonsinismo pidió postergar el debate interno hasta después de octubre para no afectar la imagen de los candidatos. En paralelo, el alfonsinismo logró que los candidatos a gobernador de Entre Ríos, Atilio Benedetti, y de La Pampa, Juan Carlos Marino, ratificaran en público su apoyo a la fórmula Alfonsín-Javier González Fraga, en medio de los rumores que indicaban una incorporación a sus boletas del candidato del FAP, Hermes Binner.

La estrategia de relanzar la campaña arrancará hoy, cuando Alfonsín se muestre junto a los titulares de la UCR en todo el país. Será una foto que intentará mostrar unidad y respaldo al hijo del ex presidente, golpeado por el empate cabeza a cabeza con el peronista disidente Eduardo Duhalde y por la brecha de 38 puntos que lo separa de Cristina Fernández.

Pero puertas adentro la situación está lejos del clima de unidad. “Se encerraron, decidieron un montón de cosas solos, el vice, los cierres de listas, la campaña mediática y ahora quieren socializar la catástrofe. Más que un relanzamiento, esto es un sálvese quien pueda”, sintetizó a Página/12 un encumbrado dirigente radical. Al encuentro del bloque presidido por Ricardo Gil Lavedra, que se realizó en el despacho del diputado Gustavo Cusinato, concurrió un consultor y politólogo que explicó los motivos de la buena elección del kirchnerismo. Varios diputados estuvieron ausentes y otros se fueron apenas comenzó la reunión, enojados por la falta de autocrítica alfonsinista. El ex titular de la bancada, Oscar Aguad, entre otros.

Los lineamientos centrales que planteó el alfonsinismo en el encuentro fueron tres. Dejar la disputa interna y el pase de facturas para después de octubre. No hacer de la elección presidencial una elección legislativa, como había planteado solapadamente Ernesto Sanz, ya que Alfonsín todavía tiene chances de mejorar su performance. Y por último, apuntar todos los cañones contra Binner, señalándolo como “el candidato de CFK”, y remarcando la condición opositora de la UCR.

La situación de Mendoza, Entre Ríos y La Pampa será, entre otras cosas, los puntos conflictivos de la reunión del Comité Federal de hoy. En esos tres distritos circuló la versión de que los candidatos a gobernador podrían pegar su boleta no sólo a la de Alfonsín sino a la Binner. En La Pampa, el FrePam, integrado por radicales y socialistas, tiene desde antes del 14 de agosto un pedido en la Justicia para que les autorice las adhesiones tanto a Alfonsín como a Binner. De todas maneras, el candidato Juan Carlos Marino ratificó su apoyo a Alfonsín. En Entre Ríos la situación es similar. Atilio Benedetti se presenta por el Frente Progresista que comparte con los socialistas y la Coalición Cívica, lo que implica que también competiría con varios candidatos a presidente. “Si la UCR puede hacer algo para alcanzar una gobernación, nosotros no lo vamos a impedir”, concluyó anoche un hombre del riñón alfonsinista.