“Quería que mi último acto como canciller fuera uno por los derechos humanos y en homenaje a Emilio Mignone. Hoy la Presidenta tuvo la deferencia de convertir este acto en el primero de una nueva etapa”, afirmó Héctor Timerman, quien aprovechó la ceremonia de distinción a la directora del Consejo Internacional de Rehabilitación a Víctimas de la Tortura (IRCT), Brita Sydhoff, para referirse a su reasignación al mando del Ministerio de Relaciones Exteriores nacional. Momentos antes de la entrega de una placa conmemoratoria del Premio Internacional de Derechos Humanos Emilio Mignone –en referencia al creador del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS)– a Sydhoff, el canciller recordó a su padre, Jacobo Timerman, víctima de la tortura: “El trabajo del instituto no me es ajeno. Vi en mi propio padre cómo la tortura destruye hasta a las personas más fuertes”. Del evento, realizado en el Palacio San Martín, también participaron el director del CELS, Horacio Verbitsky, y la hija de Mignone, Isabel Mignone. “Saludamos a Brita como una compañera más en esta lucha”, apuntó Verbitsky, sobre la secretaria general del organismo que cuenta con 146 centros de rehabilitación a víctimas de la tortura en el mundo.