La Cámara Federal porteña confirmó el procesamiento de Luis D’Elía por la toma de la comisaría 24ª de La Boca. La Sala I del Tribunal ratificó los cargos de lesiones leves, daño agravado y privación ilegítima de la libertad contra el dirigente, pero le revocó en cambio la coacción agravada, de mayor gravedad. Por esto, es probable que el caso no llegue a juicio oral, ya que sobre los delitos que quedaron firmes correría la prescripción.

La toma de la comisaría ocurrió el 26 de junio de 2004, como reacción ante la falta de respuesta policial frente al asesinato del militante Martín “Oso” Cisneros. Según la acusación, D’Elía y los demás manifestantes entraron “de modo violento” en la comisaría y “forcejearon y rompieron elementos” de la misma, así como impidieron la salida de personas que estaban allí realizando trámites.

“Yo reivindico esa noche. No tengo ningún problema en que un juez me mande a la cárcel por haber encabezado la protesta para que el asesino de Martín Cisneros, que traficaba drogas para la comisaría, fuera preso”, señaló ayer D’Elía. “Si no hubiésemos ido a protestar, la policía jamás hubiese detenido a Juan Carlos Duarte, hoy condenado a 18 años de prisión, porque al momento de matar a Martín, Duarte tenía tres órdenes de captura en esa misma comisaría, que la policía no ejecutaba.”

Los jueces ratificaron además los procesamientos de Lito Borello, del Comedor Los Pibes de La Boca, y Alberto Bordón, que también fueron parte de la toma. Borello quedó procesado por lesiones leves y daño agravado por tratarse de bienes de uso público y atentado a la autoridad, y Bordón por atentado a la autoridad calificado y daño agravado por tratarse de bienes de uso público. El caso había sido cerrado dos veces por prescripción, pero la fiscalía apeló y la Cámara Federal de Casación Penal dispuso su reapertura.